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La próxima administración del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), deberá continuar con los desafíos que trae el nuevo paradigma que se viene a nivel mundial y regional en la sanidad animal, que se plantea como un todo, en la lucha contra la fiebre aftosa y contra otras enfermedades”, según manifestó el presidente de la autarquía, Dr. José Carlos Martin.
El mismo hizo esa acotación en el contexto del anuncio del lanzamiento de la nueva campaña de vacunación contra la fiebre aftosa y de la brucelosis bovina, el lunes 23 de este mes, en la cabaña La Tranquera, en Ypacaraí, departamento Central, a las 11:30.
Explicó que la primera campaña de inmunización contra la fiebre aftosa de 2023 se iniciará ese día y se extenderá hasta el 3 de marzo próximo, con registro hasta el 17 del mismo mes. Agregó que la inmunización será para hacienda general, acorde con la resolución N° 1.610/ 2022 del ente. “Por ser política de Estado se deberá continuar con el mismo trabajo que se inició en gobiernos anteriores al actual con la diferencia de que el avance del Brasil hacia el estatus sin vacunación va a presionar mucho más al siguiente gobierno”, acotó.
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El programa de Senacsa para erradicar la fiebre aftosa
El Senacsa impulsa un programa regional que tiene como objetivo erradicar la fiebre aftosa del continente y en ese contexto la propuesta es dejar de vacunar contra la dicho mal desde el año 2025.
Sin embargo, en reiteradas ocasiones los gremios de la producción dieron a conocer que están en contra y sostiene que el estatus libre de aftosa sin vacunación no ofrece ventajas en el mercado, solo más riesgos, por lo que ratifican su decisión de continuar con las campañas de inmunización.
La iniciativa de dejar de vacunar contra la fiebre aftosa en los países de la región se propuso como prioritario y de urgente necesidad desde las organizaciones internacionales. Específicamente la propuesta fue lanzada en el 2015, en el marco de la 42° reunión de la Comisión Sudamericana para la Lucha Contra la Fiebre Aftosa (Cosalfa), que se desarrolló los días 16 y 17 de abril de ese año en Quito, Ecuador.
Desde ese tiempo el Senacsa inició un plan para que Paraguay pueda avanzar en el estatus sanitario y acceder a la certificación de país libre de fiebre aftosa sin vacunación, poniendo como meta el 2025, para luego seguir con sistemas de vigilancias sanitarias.
En ocho años, el Senacsa disminuyó la dosis anual por animal de la vacuna contra dicha enfermedad, de 5 ml a 2 ml, y también bajó la cantidad de campañas y también eliminó categorías de animales en la vacunación.