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Los pacientes oncológicos atendidos en el Instituto Nacional del Cáncer (Incan) y otros establecimientos de salud que dependen del Ministerio de Salud Pública (MSPBS) claman debido a la falta crónica de medicamentos que padecen desde hace tiempo y que ahora se dificultará más con el millonario recorte de fondos aplicado a la compra de productos e instrumentos químicos y medicinales.
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Según el Presupuesto General de la Nación (PGN), promulgado el jueves último, se aplicó un drástico recorte presupuestario al monto asignado a la atención a la población con enfermedades oncológicas, que pasó de ser G. 436 mil millones en el 2022 a G. 341 mil millones para este año. Es decir, la reducción de fondos es de poco más de G. 95 mil millones, equivalentes a unos US$ 13 millones.
La limitación de recursos se da principalmente en el monto asignado a la compra de insumos y fármacos, que tendrá este año alrededor de G. 88 mil millones menos.
Marta Riveros es una de los miles de pacientes de cáncer que reclaman la provisión de fármacos. Ella requiere de la droga Paclitaxel para poder empezar su quimioterapia.
Asimismo, Juana Insfrán también reclama la provisión de la droga Fulvestrant. Por la falta del medicamento, desde hace tres meses está sin recibir su tratamiento contra el cáncer, lo que ya le está ocasionando complicaciones de salud. El fármaco cuesta alrededor de G. 1.800.000.
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En una situación similar se encuentra Felicita González, quien mediante un video difundido en redes sociales hizo un llamado al presidente de la República, Mario Abdo Benítez, denunciando el recorte presupuestario aprobado para este año. La paciente pidió más consideración hacia las necesidades oncológicas.
Actualmente, la Asociación de Pacientes con Cáncer y Familiares (Apacfa) lleva adelante amparos colectivos para poder paliar la grave situación. No obstante, de las más de 80 acciones judiciales, recién 14 personas han obtenido sus medicamentos.