Día Internacional de la Niña: en Paraguay 13.000 menores dieron a luz en el 2021

La Asamblea General de las Naciones Unidas estableció el 11 de octubre como Día Internacional de la Niña, con el objetivo de visibilizar las vulneraciones que atraviesa este grupo y promover el cumplimiento de los derechos humanos. Sin embargo, los números en Paraguay son alarmantes. Unas 13.000 niñas dieron a luz en el 2021; entre ellas están quienes concibieron por segunda y hasta por tercera vez.

Imagen ilustrativa.
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En el Día Internacional de la Niña, donde se busca promover el cumplimiento de sus derechos, Paraguay aún tiene una ardua tarea por desarrollar, ya que las tasas de embarazo, así como de pobreza, acceso a salud y educación son alarmantes.

Sólo en el año 2021 en Paraguay 13.579 niñas de entre 10 y 19 años dieron a luz, de las cuales 490 tenían entre 10 y 14 años de edad.

Los datos que da a conocer la Coordinadora por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia, señalan además que del total mencionado de niñas que dieron a luz, 10 de entre 10 y 14 años lo hicieron por segunda vez y 1 niña dio a luz por tercera vez.

En la franja de edad de entre 15 y 18 años, 1.170 adolescentes dieron a luz por segunda vez en el 2021; mientras que 118 adolescentes dieron a luz por tercera vez.

Los fallecimientos entre el 2020 y el 2021 de niñas y adolescentes de entre 10 y 19 años durante el embarazo, parto y puerperio totalizaron 24.

En Paraguay 13.579 menores dieron a luz en el 2021.
En Paraguay 13.579 menores dieron a luz en el 2021.

Día Internacional de la Niña: “Tenemos que darles el hogar que se merecen”

La abogada Claudia Sanabria, directora de Género del Ministerio de Salud, comenta se está trabajando principalmente con los profesionales de salud para mejorar las respuestas en cuanto a esta problemática.

“Es sumamente importante mirar más a la infancia. Tenemos que darles el lugar que se merecen, no tratarles como una cosa”.

La profesional explica que uno de los pasos más importantes es respetar al niño y a la niña, ya que de esa manera se construye su personalidad. Tienen que tener la oportunidad de decir que no, porque esa es parte de la prevención.

“Algo muy sencillo pero tan arraigado que tenemos que dejar de lado es el obligarle al niño o niña a abrazar o dar un beso a un extraño que llega a la casa. Solemos decirles que se acerque a saludar, que le abrace porque es su tío, tía o que le de un beso, pero es un extraño para él o ella. Debemos respetar la decisión del niño o niña”, enfatizó.

En cuanto a los trabajos que se realizan desde el sector de Salud, manifestó que existen varios niveles, programas a nivel país y que se trabaja de manera interinstitucional, con el Ministerio de Salud, Niñez, de la Mujer, Codenis, Fiscalía, entre otros.

Agregó que se enfatiza en la capacitación de los profesionales para dar respuestas inmediatas, así como en la prevención y en la búsqueda de protección ante el hecho.

“La voz de los niños y niñas no se escucha”

Sanabria instó a prestar más atención a los niños y niñas, tomarse el tiempo para escucharlos, porque es uno de los factores para la prevención, “escucharlos e informarlos”.

Cuando se habla de segundo y tercer embarazo, explica que existen muchos factores para que eso suceda, aún luego de haber tomado medidas con el primer embarazo.

“Por ejemplo, sacarla del entorno agresor suele resultar un problema, porque hay dificultad cuando la familia es la agresora. También necesitamos más familias acogedoras y las respuestas tardan en llegar”, indica.

Manifestó además que desde la justicia también se deben fortalecer las medidas respecto al agresor, ser más contundente y la sociedad debe denunciar más, perder el miedo.

Día Internacional de la niña: 453.703 niñas y adolescentes mujeres, en Paraguay, se encuentran en situación de pobreza.
Día Internacional de la niña: 453.703 niñas y adolescentes mujeres, en Paraguay, se encuentran en situación de pobreza.

Posicionarse a favor de la no violencia

La abogada Claudia Sanabria explica que hay niveles de violencia, que incluso en el nivel que aparentemente es más leve, la sociedad no se anima a denunciar y “necesitamos un control social”.

“Cuando hombres mayores de edad se dan vueltas a mirar a una niña de 12 o 15 años, nadie le dice que eso está mal, que es una menor, que es una forma de violencia. La sociedad se calla”.

Insiste en la necesidad de posicionarse, como sociedad, a favor de la no violencia.

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