Cargando...
Desde la medianoche de este miércoles, transportistas de colectivos de larga distancia se sumaron al paro de transportistas exigiendo la baja del diésel de al menos G. 3.000. Las empresas de transporte Ciudad de Pilar y Ñeembucú son las que se sumaron a la medida de fuerza, por lo que fueron suspendidos los viajes a Asunción, Ciudad del Este y Encarnación.
Por la tanto, la actividad dentro de la terminal se vio afectada, ningún pasajero se asomó por el lugar a pesar de que los colectivos que hacen viajes al interior del departamento de Ñeembucú, se encuentran trabajando normalmente.
Lea más: Anuncian paro de buses de mediana y larga distancia desde la próxima semana
El administrador de la terminal Edgar Alviso, indicó que las empresas que se sumaron a la medidas fuerza son dos, Ciudad de Pilar y Ñeembucú mientras la empresa la Encarnacena abandonó la ruta Asunción- Pilar desde hace varios meses.
El propietario de un restaurante que funciona dentro de la terminal, Hugo Moscatello, dijo que afecta el paro de los transportistas. “Hay menos gente, menos recaudación y más problemas económicos”, dijo el comerciante dedicado al rubro hace 6 años.
“En días normales es mayor la afluencia de gente, nos estamos recuperando de una pandemia, todo va creciendo de a poquito pero, estas cosas frena el crecimiento. Aunque todo tiene sus motivos, ojala que pronto lleguen a un acuerdo y se solucione el problema”, dijo Moscatello.
Taxistas apoyan la medida de fuerza
Rubén Sosa, de la Asociación de taxistas de Pilar, señaló que el gremio de los taxistas apoya el paro de los transportistas teniendo en cuenta que también serán beneficiados en caso de que el diésel baje, pero, sin embargo señaló que también son perjudicados por la falta de afluencia de pasajeros.
“Esta madrugada trabajamos con los últimos pasajeros que llegaron de Asunción y después ya no hubo movimiento”, dijo Sosa.
A pesar de que los colectivos que realizan viajes dentro del interior del departamento de Ñeembucú se encuentran trabajando normalmente, los pasajeros de estas unidades casi no utilizan el servicio de taxis porque son trasladados por minibuses o mototaxis.
“Nosotros dependemos muchos de los colectivos que vienen de la capital del país. Esta madrugada nos movimos un poquito. Los pasajeros del interior no nos mueven tanto por que ellos no se quedan en la terminal”, acotó Sosa.
Sosa se quejó de las autoridades municipales de no aplicar las ordenanzas y prohibir a los minibuses con chapas argentinas ingresar dentro de la terminal para llevar pasajeros.
“Los minibuses con chapas argentinas no están habilitados por DINATRAN, pero igual entran dentro de la terminal y llevan a los pasajeros y eso nos perjudica, ” remató el trabajador.