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Las autoridades portuarias habrían detectado el cargamento de cocaína el pasado 12 de junio e inmediatamente alertaron a los organismos de seguridad. Tras las últimas experiencias, aparentemente casi todos los contenedores con productos orgánicos que fueron embarcados en Paraguay son verificados con más minuciosidad en las terminales portuarias del viejo continente.
Aunque en este caso autoridades de la Aduana paraguaya supuestamente alertaron a su pares de Bélgica que un cargamento sospechoso estaba en camino para ese país.
Según la secuencia del envío, 30 de marzo salen cuatro contenedores con la carga de arroz del Puerto Caacupemí de Asunción en el remolcador de empuje Arary. El 2 de abril llega la mercadería al Puerto Caacupemí de la ciudad de Pilar, en el departamento de Ñeembucú. El 5 de abril sale el cargamento del Puerto Caacupemí de Pilar en el buque Doña Verónica.
Mientras que el 11 de abril llega el buque Doña Verónica al puerto de Montevideo, en Uruguay, el 5 de mayo sale de mercadería del puerto de Montevideo en el buque Maipó y el 12 de junio llegada el Maipó a Amberes, Bélgica.
Tras la intervención de la Policía de Países Bajos se abrieron los vagones y fueron contabilizados y pesados los panes de cocaína que iban ocultos en las bolsas, fue así que se pudo determinar la cantidad de 5.170 kilos de este cargamento, que era para los Países Bajos.
Desde el mismo momento en que los organismos de seguridad belga confirmaron la incautación y el origen del producto comunicaron el caso a las autoridades de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), cuyos agentes comenzaron a trabajar en el caso juntamente con fiscales de la unidad Antidrogas.
Fuentes de la Senad confirmaron que las investigaciones en este caso ya están muy avanzadas, se logró identificar la firma productora del arroz, que es una empresa agroexportadora que también opera en el rubro de la yerba mate, que no tendría ninguna vinculación con la droga. En ese caso se puede hablar de que el cargamento de cereales fue contaminado posiblemente en poder de los intermediarios, dijeron las fuentes.
Grave omisión sobre cocaína, según la Fiscalía
Sin embargo, el fiscal de la unidad Antidrogas Osmar Segovia aseguró que las autoridades de Aduanas de nuestro país cometieron un gravísimo error ya que estos alertaron a sus pares de Bélgica la salida del cargamento sospechoso y no hicieron lo mismo con la Fiscalía paraguaya. “Si nosotros manejábamos el dato hasta podríamos haber articulado un operativo para capturar a todos los responsables”, indico Segovia.
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La Aduana como cualquier otras persona o institución tiene la obligación de avisar sobre un posible hecho punible, esto roza lo ilegal, enfatizó Segovia.
Por su parte responsables de la Aduana respondieron que no dieron el alerta por miedo a que se filtre el dato y comprometa la operación en Europa.
Parecida a “A Ultranza PY”
Igualmente, los agentes de la Senad señalaron que una estructura similar a la que tenía el presunto capo narco fugitivo Miguel Ángel Insfrán Galeano, alias Tío Rico, que según la Fiscalía llegó a exportar miles de kilos de cocaína a través de los puertos privados de Paraguay y que fue desmantelada gracias al operativo internacional A Ultranza Py, es la que remesó esta vez el enorme alijo del “polvo blanco” detectado en Amberes.
Unas 50 toneladas de cocaína incautada
Con este cargamento, asciende a casi 50 mil kilos de la droga que fueron embarcados en puertos privados del Paraguay y terminaron incautados en las distintas terminales portuarias de Europa, lo que significa un enorme golpe económico a las estructuras mafiosas del ramo.
Pero por el contrario, confirma que el Paraguay sigue siendo el principal punto de salida de la droga producida en los países de la región, con destino a los mercados de consumo del mundo, señalaron.