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De martes a domingo es imposible dormir y descansar en forma en el barrio Las Mercedes, según denunciaron miembros de la Agrupación Barrial Salvemos Las Mercedes
Conforme al relato de dos de las vecinas, desde que se apostaron en la zona numerosos bares, sufren todas las noches polución sonora, puesto que los locales nocturnos ponen música a decibeles muy por encima de los permitidos para un barrio residencial.
Indicaron que en numerosas ocasiones denunciaron el hecho a la Policía, la Municipalidad y el Ministerio Público, pero a pesar de esto los bares siguen operando sin restricciones.
A la imposibilidad de descansar a causa de los ruidos molestos, se suma la insalubridad porque muchos bares preparan alimentos en la vereda, sin cumplir normas básicas de higiene. También se acentuó la inseguridad por la gran afluencia de personas.
Declararon que son al menos 18 bares los que se ubicaron en el barrio y piden la intervención de la Fiscalía de Delitos Ambientales. “Todavía no se está dimensionado el daño que causa a las personas la polución sonara”, dijo una de las afectadas.
Otro de los problemas generados por la proliferación de bares en el barrio Las Mercedes es la masiva presencia de cuidacoches, quienes ingresan sin autorización a propiedades privadas, para juntar agua y otros, según denunciaron.
Los locales que mayor número de quejas acarrean de parte de los vecinos del barrio son Juan de Salazar, Padre Cardozo y Washington.
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