En un recorrido por varias arterias de nuestra capital del país, es posible observar una gran cantidad de baches y agua servida, además del hundimiento del pavimento y la deformación de la capa asfáltica. Este problema sigue sin ser atendido por la Municipalidad de Asunción, a cargo del intendente Óscar Nenecho Rodríguez.
Recientemente, ante el reclamo de un internauta que mostraba baches en determinadas direcciones, Rodríguez expresó que no tenía problemas de debatir y evacuar consultas pero a vuelta de Semana Santa.
En otra respuesta en Twitter, el pasado 11 de abril, el intendente dijo: “yo también solo quiero que Essap repare sus pérdidas de agua, ahí voy a poder trabajar bien y arreglar todas las calles haciendo bacheo y recapados”.
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Si bien parte de la rotura del asfalto en Asunción es para la ampliación de la red de cañerías o reemplazo de piezas por parte de la Empresa de Servicios Sanitarios (Essap), en otras zonas los baches y el agua servida son problemas de tiempo atrás, que no tienen que ver con la Essap y denotan la ausencia de la Municipalidad. Por ejemplo, en las calles Guillermo Arias y Bartolomé Coronel, en inmediaciones de la morgue judicial, los vecinos esperan refacciones desde hace meses.
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La misma situación se repite sobre Molas López casi Itapúa, límite entre los barrios Trinidad y Mburucuya, donde el inconveniente está presente desde mucho antes del inicio de las obras de desagüe pluvial en el lugar. Otros baches de importancia están sobre Víctor Haedo y Alberdi, en el microcentro. En este último caso, comerciantes colocaron una caja de frutas como señalización para los conductores.
Sobre la avenida Artigas, a pocas cuadras de General Santos, y en las calles Mayor Joel Estigarribia esquina Lázaro González, del barrio Santa María, se puede notar hundimiento del pavimento, baches de grandes proporciones y acumulación de agua.