Cargando...
“(El Partido Colorado) sí depura sus filas, depura las narcopolítica. Los tribunales son autónomos, por ejemplo si se presentan alguna denuncia, deben actuar”, expresó ayer a ABC Eduardo González Báez, apoderado general del movimiento Honor Colorado (HC). Fue al ser consultado por qué la ANR protege a una larga lista de cuestionados políticos colorados condenados o con procesos judiciales.
El jueves pasado, el Tribunal de Conducta (TC) resolvió de manera cautelar excluyendo del padrón colorado a los procesados en la operación “A Ultranza Py”: el imputado exdiputado Juan Carlos Ozorio (oficialista), Alberto Koube y de los hermanos José y Miguel A. Insfrán.
El apoderado de HC refirió que de acuerdo a antecedentes, está observando que el TC está actuando de oficio ante casos vinculados al narcotráfico, como en su momento se dio con la ex diputada cartista Cynthia Tarragó, condenada por lavado de dinero del narcotráfico en Estados Unidos de América (EE.UU.). Pero se olvidó del acusado diputado cartista Ulises Quintana.
“El Partido Colorado sí depura sus filas”, remarcó. Agregó que la presentación de pedido de expulsión o cancelación de afilación ante el TC lo puede llevar adelante cualquier correligionario. Al ser insistido, por qué siguen campantes en la ANR condenados por la justicia, como el clan González Daher, González Báez respondió que “todos los procesos tienen sentencia de primera instancia. Al quedar firme, (el Tribunal de Conducta) tienen que actuar. El tema es más drástico en casos de narcotráfico”, justificó.