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En el año 2001 Paraguay llegó a ocupar el primer lugar en el mundo como país con mayor adopción de siembra directa llegando al 90 por ciento de su superficie agrícola de cultivos extensivos, sin embargo, luego en el 2013 y por medio de imágenes satelitales se pudo verificar que el área disminuyó a 73 por ciento, esto despertó la preocupación de la Federación ya que representaba una pérdida en la calidad y capacidad productiva de los suelos, empezó diciendo nuestro entrevistado.
Volver a crecer
“La baja en la adopción de la siembra directa por parte de los productores fue un golpe duro, y la Federación con especialistas en manejo de suelos de nuestro país nos pusimos como meta recuperar terreno perdido, iniciando giras de capacitaciones a productores en el 2014. En el 2016 con el 1er Encuentro Nacional de Siembra Directa en Santa Rita, Alto Paraná, trazamos una línea muy importante de difusión, lo cual siguió durante todo el 2017 hasta agosto de 2018, donde se logró llegar a los 80 por ciento con Siembra Directa, y a fines del 2019 ya estábamos en el 90 por ciento, pero lo que debemos mejorar es la calidad del sistema. Para mantenernos e inclusive aumentar, debemos seguir esta línea de capacitaciones con giras,simposios y encuentros nacionales, Investigar y desarrollar nuevos programas de estudios, pero ahora el desafío es trabajar como sistema y a esto tenemos que agregarle calidad que sería cero remoción de suelo, cobertura permanente y rotación de cultivos, aumentando la materia orgánica (carbono al suelo)”, destacó Cubilla.
Podemos crecer en área de siembra y kg por hectárea
Paraguay siembra hace varios años entre las 3,2 a 3,5 millones de hectáreas, y le consultamos al ingeniero si en la región Orientalse puede seguir creciendo en área de cultivo y aumentar los rendimientos promedios, en el caso de la soja que esta en torno a los 2.700 kilos por hectárea “Creo que la región Oriental tiene una capacidad inmensa para llegar aun a su techo, por ejemplo el departamento de San Pedro tiene 2 millones de hectáreas, y estimamos que esta al rededor de 400 mil para soja, maíz, trigo y cultivos en asociación. Dicho departamento tiene un potencial de crecimiento enorme en las fincas de pequeños productores, como esta ocurriendo en últimos 2 años, mediante la colaboración de la UGP en la capacitación en distintos asentamientos, con excelentes resultados. En lo que respecta a rendimiento por hectárea de estos cultivos, definitivamente se puede aumentar y mucho, hay zonas en donde se producen 5.500 a 6.000 kilos por hectárea de soja, bajo elsistema de siembra directa con calidad, pero el promedio nacional esta en la mitad; sin dudas necesitamos inyectar mayor dinero en la investigación, generar conocimiento e información local, y sobre todo desdoblar esfuerzos en la asistencia técnica para el productor, que sin dudas el camino es el sistema de siembra directa con calidad”.
Costo de oportunidad
“Estamos dejando de ganar dinero (oportunidad de ganancia) en lo que respecta al aumento de producción de kilos por hectárea, sea de soja, maíz, trigo por solo citar algunos cultivos, estamos lejos de alcanzar el potencial de rendimiento” destacó nuestro entrevistado.
¿Estamos mal o bien?
“Estamos bien, pero podemos estar mucho mejor, en lo que respecta a la rotación de cultivos, principalmente en la incorporación y diversificación de abonos verdes como cultivos de cobertura en el sistema de producción. Esto nos falta trabajar mucho, hay poca gente que produce semillas de abonos verdes de calidad y a buen precio, esto falta mejorar urgentemente. Siempre la recomendación va ser que el productor conozca la fertilidad de su suelo con muestreos correctos y análisis en laboratorio, para poder interpretar correctamente, corregir caso sea necesario, fertilizar y así nutrir la planta de manera equilibrada; se hace, pero muy poco y a veces mal. Usando los abonos verdes como cultivo de cobertura e incluso fertilizando el sistema, vamos a lograr una producción cada vez mas sustentable y amigable con el medio ambiente, disminuyendo gradualmente el uso de agroquímicos (fertilizantes, herbicidas, insecticidas, etc) además citando los beneficios que nos brinda el sistema conservacionista. Un suelo más sano, plantas más sanas y mas productivas”, finalizó el titular de Fepasidias y Nuestrosuelo.