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La señora Deleón había presentado querella por homicidio culposo contra el Dr. Aurelio Espínola Caballero, propietario de la Clínica La Veró, donde falleció su marido, luego de que el profesional no detectara que el exparlamentario ya padecía coronavirus y le suministraba tratamiento para otra dolencia en el marco de un procedimiento de “medicina alternativa”.
“Mi marido era asistido por este médico (Espínola Caballero) desde hacía años. Él iba para un tratamiento con un procedimiento de medicina alternativa, que no estaba aprobado por la ciencia”, lamentó Deleón.
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La viuda: “Era amigo de la familia”
“Era amigo de la familia, estuvo en casa compartiendo cenas con mi marido y él le tenía una confianza de amigo. Le confió muchísimo, hasta mi suegro era atendido en esa clínica. Todo eso le condujo a una confianza extrema porque lo que el médico le indicaba, él confiaba, seguía las indicaciones. También yo, jamás pude imaginar, porque es neurólogo, no es especialista en problemas respiratorios, una irregularidad muy visible”, explicó.
La camarista relató cronológicamente cómo se fueron dando los hechos que derivaron en el fallecimiento de su marido y lamentó las trabas en el proceso legal.
“Mi marido estaba yendo cada semana a realizarse un procedimiento que es para el fortalecimiento del sistema inmune (vitamina C, ozonoterapia endovenosa). Le convenció el profesional desde que empezó la pandemia y acentuó más para mantenerle fortalecido en sus defensas. A mi marido le interesaba todo el procedimiento que iba a fortalecerle sus defensas y confió en él”, señaló.
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“El médico le decía que era estrés”
“Desde el lunes 17, mi marido estaba siendo asistido, pero le estabilizaban, yo le notaba muy cansado pero le decía el médico que era el estrés, entonces le aplicaba estos procedimientos de medicina alternativa, pero mi marido ya tenía coronavirus. A raíz de esa imprudencia, todos nos contagiamos y a él nunca se le hizo la prueba COVID”, indicó.
“Desde el miércoles a la tarde ya fue a la clínica porque en el trabajo tuvo dificultad respiratoria, ya con casi 40°C de fiebre. Ante esta situación, lo que el médico menos consideró fue una placa o un hisopado. El jueves y el viernes estuvo en esa clínica y el viernes por la noche, ante mi insistencia, a la medianoche se le trasladó al sanatorio La Costa, donde falleció”, recordó la viuda del parlamentario.
“Le aplicó su propio plasma”
“Este doctor le aplicó su propio plasma y el estado de mi marido empezó a empeorar aún más después de este procedimiento. Le aplicó su plasma fuera de tiempo, ya habían pasado muchos meses después de que el doctor tuvo coronavirus, ya no iba a funcionarle ese plasma”, reclamó.
“La noche del jueves 20 de agosto, mi marido estuvo asistido por un médico de guardia de apellido Ciprione, que es odontólogo, cirujano oral, después tomé conocimiento de eso. No usaba ni tapabocas porque alegaban que ellos ya eran inmunes”, denunció.
Deleón lamentó entre sollozos lo ocurrido y denunció que tiene contacto con otras tres familias cuyos integrantes fallecieron en la clínica por las mismas consecuencias.
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“Tengo conocimiento de tres familias que también fallecieron en esa clínica. Incluso una persona y su madre fallecieron allí con diferencia de horas, con este mismo procedimiento irregular. Hay una denuncia incluso por Fiscalía ya”, afirmó.
“Intentan dilatar el proceso”
“Ni siquiera se lograron medidas para el denunciado porque intentan dilatar el proceso con una serie de recusaciones. Más de cuatro meses ya están dilatando para que no se concrete esa audiencia. El fiscal Giovanni Grisetti solicitó prisión domiciliaria, pero hasta el momento no se concretó porque sus abogados permanentemente están dilatando el proceso”, denunció.
Deléon indicó que el doctor Espínola Caballero sigue ejerciendo porque la clínica se volvió a habilitar de forma provisoria.