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Con 1 grado durante la noche y madrugada, en la capital del país, el móvil de la SEN recorre varios lugares en busca del abordaje a estas personas en situación vulnerable. Es así que esta madrugada de tanto frío, el albergue situado en Fulgencio R. Moreno esq. Parapiti llegó a su cupo máximo.
La SEN solo aborda a adultos y son varios los datos que se desprenden de estos rescates. Por ejemplo; el número de hombres es bastante mayor al de mujeres rescatadas. Teniendo en cuenta que el cupo límite de traslado al albergue es de 50 personas, fueron trasladados 42 hombres y 8 mujeres. Uno de los aspectos que resaltó el coordinador de albergues de la SEN, Rubén Cuevas fue la franja etaria de los atendidos en esta jornada.
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“Ahora llama muchísimo la atención la edad de las personas en situación de calle. Cuando antes rescatábamos a gente de 70-75 y hasta 80 años, ahora esto está cambiando. Tienen entre 40 y 60 años y están tan dejados, que solo después de un baño cuando les recortamos el cabello y la barba, ahí se les nota la edad”, comentó el coordinador a #TalComoEs, programación de la 98.5 ABC fm.
Entre el abandono y las adicciones
Las razones por las que estas personas adultas y adultas mayores permanecen en situación de calle son varias, aunque ubicamos dos denominadores comunes: en su mayoría son hombres y el 90% tiene adicción al alcohol. Algunos viven con alguna discapacidad y otros remiten ser un “estorbo” para sus familias.
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“Cuando llegamos a rescatar una persona, la abstinencia al alcohol es terrible, imaginate que en el albergue hay que hacer 2 tipos de cocidos, uno con leche y otro negro porque no todos toleran la leche ya que choca con el alcohol. Algunas personas vienen ´mareaditos´ y no se les acuesta en una cama, se les acuesta en el suelo porque anteriormente ya tuvimos gente que se caía de la cama. Así vamos creando nuestras estrategias” comentó.
Las reglas del albergue
Para permanecer en el albergue y guarecerse del frío intenso estas personas deben cumplir con ciertas reglas como cumplir los horarios establecidos para las comidas, el aseo personal, el uso de tapabocas, respetar el ambiente calmo. Inclusive algunos colaboran con la limpieza. Algunos permanecen en el lugar todo el día y otros apenas amanece solicitan volver a la calle.
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Los que no quieren ayuda: “Déjenme morir”
Siempre hay personas que se resisten a ser trasladadas. “Yo te cuento un caso, tuvimos varias denuncias de una persona postrada que estaba en Gral. Santos y Eusebio Ayala, es un señor que vive ahí, que tiene varias fracturas de hueso, le llevamos abrigo pero él solo repite: ´Déjenme morir´, una y otra vez. También sobre Rodríguez de Francia y Perú hay otro grupo de adultos mayores de 80 años que te dicen ´acá voy a morir, como militar en mi puesto voy a morir´. Por eso, hoy se puede ver una diferencia en la gente en situación de calle; si tiene el cabello cortito, está barbeado, es porque antes pasó por el albergue sí o sí”, comentó el coordinador.
Tener “calle” en situación de calle
Respecto a los lugares en la capital donde en su mayoría se encuentran las personas en situación de calle, nos comentó que esto va cambiando. Cuando se creería que el Mercado Nro. 4 es la zona predilecta, hace varios días el abordaje devela que la zona con más casos es Eusebio Ayala y Rca. Argentina. Estas personas remiten que esta zona es mas “tranquila” que otras .
Si bien el trabajo de la SEN es importante, es necesario un trabajo más a fondo con las personas que viven en esta condición. El trabajo debe ser a nivel interinstitucional y llevarse a cabo observando caso por caso.