Asaltan a mano armada una despensa en Caacupé

Momentos de terror vivieron los miembros de la familia de Sixto Ferreira (60), cuando fueron víctimas de un violento asalto a mano armada en su propio domicilio, donde tienen una pequeña despensa. Los delincuentes actuaron con suma violencia y se llevaron cerca de G. 7.000.000.

El vehículo en el que se desplazaban los delincuentes era robado y fue encontrado incinerado en un camino vecinal de la Compañía Cerro Real de Caacupé.
El vehículo en el que se desplazaban los delincuentes era robado y fue encontrado incinerado en un camino vecinal de la Compañía Cerro Real de Caacupé.

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El hecho ocurrió ayer, aproximadamente a las 19:45, en la Despensa “Blanquita”, ubicada en el Barrio San Francisco de Caacupé. Según el reporte, tres hombres con pasamontañas y pistolas ingresaron en mano ingresaron intempestivamente al salón de ventas, donde se encontraba Johanna Ferreira (30).

Los delincuentes redujeron a la mujer y la llevaron dentro de la casa. Sus padres, Sixto y Stella Marie, se encontraban saliendo de la sala cuando fueron interceptados por los maleantes, quienes los obligaron a tirarse en el piso, mientras ellos revolvían la casa en busca de dinero.

Según el testimonio de las víctimas, los hombres sabían exactamente donde buscar, puesto que fueron directamente al dormitorio y buscaron en el ropero la caja de seguridad en la que la familia tenía G. 6.000.000. De la caja del local se llevaron cerca de G. 1.000.000, por lo cual el total de lo sustraído ronda los G. 7.000.000.

Uno de los asaltantes intentó bajar la puerta metálica del negocio, pero la misma se trancó a mitad del cierre, un hecho que las víctimas califican de “afortunado”, pues piensan que la intención era tenerlos de rehenes.

Otro de los malvivientes golpeó con la culata del revólver al señor Sixto, cuando éste se resistió a ser maniatado. La huella del golpe quedó en la parte posterior de una de sus manos, puesto que intentó proteger su cabeza. También recibió varias patadas, por lo cual gritó y precipitó la salida de los asaltantes.

Al salir, los delincuentes tomaron del cabello a la hija de la pareja y la obligaron a que entregue el disco duro donde se guardaba la memoria del circuito cerrado. Horas después, el vehículo robado en el que se desplazaban los delincuentes fue encontrado incinerado en un camino vecinal de la Compañía Cerro Real de Caacupé.

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