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Una comitiva encabezada por el fiscal Joel Cazal incursionó esta mañana en la zona donde ayer un grupo armado tomó como rehenes a los peones y quemó una vivienda, además de una camioneta, dos tractores y una cosechadora. Se trata de la estancia Jaguary, cuyo propietario es Pablino Mendoza.
Militares, policías y efectivos de la FTC se abocaron a la tarea de encontrar elementos para determinar la autoría del ataque que, por el modus operandi, es atribuible al EPP, según manifestó el jefe de Investigación de Delitos de Amambay, comisario principal Feliciano Martínez.
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Según el relato de los intervinientes, cerca de las 21:00 de ayer, sábado, un grupo de desconocidos ingresó en la estancia, tomó como rehenes a dos peones, para luego quemar la maquinaria y la casa del administrador de la estancia.
Los delincuentes dejaron una carta dirigida al propietario del establecimiento. Este documento ya se encuentra en poder de los investigadores para su verificación. Luego de las evaluaciones, determinarán si se trata o no de otro ataque del EPP, pero están 99% seguros de que se trata de la banda delictiva, conforme a las declaraciones del comisario Martínez.
Los dos empleados de la estancia fueron liberados minutos después del ataque, por lo que se descarta un secuestro.
Dos ataques de forma consecutiva
El viernes por la noche se registró el ataque a la estancia denominada Yukeri, ubicada en el distrito de Yby Yaú, departamento de Concepción, más específicamente en la zona de la colonia Herminio Mendoza, más conocida como Pasiño. Los delincuentes operaron de la misma forma que en la estancia de Amambay, quemando tractores y reteniendo a los peones hasta abandonar la zona.
A ambos casos se asignaron fiscales que ya abrieron las investigaciones pertinentes para determinar la autoría de los hechos.
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