Bush, de 89 años, tomó la decisión tras enterarse de que varios miembros de su equipo de seguridad se habían afeitado la cabeza en la última semana como muestra de apoyo a Patrick, el hijo de Jon, uno de sus guardaespaldas.
En una fotografía difundida por su oficina, Bush aparece sonriente y sentado en su silla de ruedas con Patrick en su regazo y la cabeza completamente afeitada. El exmandatario dijo que “había sido muy fácil para él hacerlo”, aseguró McGrath a la cadena CBS.
Bush y su esposa Bárbara perdieron a su primera hija Robin a causa de la leucemia en 1953, cuando la pequeña tenía sólo tres años, y han dedicado grandes esfuerzos durante toda su vida a iniciativas relacionadas con la investigación sobre el cáncer.
Los guardaespaldas de Bush han lanzado una página web, www.patrickspals.org, para ayudar con las facturas médicas del pequeño, a la que el exmandatario y su esposa ya han contribuido con una donación.
Además, el grupo organizó una carrera benéfica en motocicleta a través del estado de Maine, de 80 kilómetros de duración, para el próximo 10 de agosto, seguida de una subasta para recaudar fondos para los tratamientos de Patrick, señaló la oficina del expresidente.