Orígenes distintos
El Dachshund, también conocido como perro salchicha, tiene sus raíces en Alemania. Originalmente fue criado para la caza de tejones y otros animales de madriguera.
Su cuerpo alargado y patas cortas le permitían escarbar y entrar en túneles.
Por otro lado, el Chihuahua es originario de México y se considera la raza de perro más pequeña del mundo.
Su historia está ligada a antiguas civilizaciones mesoamericanas, donde era apreciado por sus cualidades espirituales y como compañía.
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Apariencia física
El Dachshund se caracteriza por su forma alargada, orejas largas y un peso que puede variar entre 5 y 14 kilos, según el tipo (estándar o miniatura).
Su pelaje puede ser corto, largo o duro y viene en una variedad de colores y patrones.
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En contraste, el Chihuahua es mucho más pequeño, con un peso habitual de entre 1,5 y 3 kilos.
Tiene orejas grandes y erguidas, una cabeza redonda (conocida como “cabeza de manzana”) y puede tener pelo corto o largo.
Temperamento y personalidad
Ambas razas tienen una personalidad fuerte, pero presentan diferencias notables.
El Dachshund es conocido por su valentía, terquedad y naturaleza juguetona. Puede ser desconfiado con los extraños, pero leal a su familia.
Los Chihuahuas, aunque diminutos, tienen un carácter audaz y a menudo se consideran perros “guardianes” debido a su tendencia a ladrar ante cualquier novedad. Son apegados a sus dueños y pueden volverse celosos o sobreprotectores.
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Cuidados y necesidades
A pesar de su tamaño, el Dachshund requiere actividad física regular para evitar el sobrepeso, que puede causarles problemas de espalda debido a su anatomía.
Los paseos diarios y el juego son fundamentales. Su pelaje, dependiendo del tipo, puede requerir más o menos cuidado.
En el caso del Chihuahua, su fragilidad física hace necesario protegerlo de caídas y temperaturas extremas. Son más susceptibles al frío y suelen preferir ambientes cálidos.
Ambos necesitan socialización temprana para evitar comportamientos indeseados, como la agresividad hacia otros perros o personas.
Salud y longevidad
El Dachshund puede vivir entre 12 y 16 años; sin embargo, es propenso a problemas de disco intervertebral y obesidad.
Los Chihuahuas, por su parte, llegan a vivir hasta 18 años en muchos casos y aunque suelen ser bastante saludables, pueden sufrir problemas dentales y de corazón, así como luxación de rótula.
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¿Cuál es mejor para vos?
La elección depende del estilo de vida del futuro dueño. Los Dachshund pueden ser preferidos por familias activas y pacientes, mientras que los Chihuahuas suelen adaptarse bien a personas solas o parejas.
En ambos casos, la formación y el afecto son esenciales para el bienestar del perro.
En conclusión, tanto el Dachshund como el Chihuahua demuestran que el tamaño no define la personalidad. Pequeños en estatura, grandes en carácter, estas razas ofrecen diferencias notables y encantadoras para quienes consideran sumar un nuevo integrante peludo al hogar.