Cuando los seres humanos atraviesan momentos difíciles, no es inusual escuchar historias sobre mascotas que, al notar el llanto de sus dueños, se les acercan, los lamen o simplemente se quedan a su lado en silencio. Pero, ¿realmente nuestros perros nos entienden cuando lloramos? ¿Es esto una muestra de empatía o solo una interpretación humana de su comportamiento?
Repasamos lo que dice la ciencia sobre el vínculo emocional entre perros y personas.
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Reconocen las emociones humanas?
Diversas investigaciones han señalado que los perros son muy sensibles a las señales emocionales de sus humanos.

Un estudio publicado en la revista Animal Cognition demostró que los perros no solo reconocen el llanto, sino que tienden a responder de manera diferente frente a él, comparado con otras emociones como la risa o la tranquilidad.
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En ese experimento, los investigadores observaron a varios perros expuestos a sus dueños simulando llanto, cantando o manteniéndose neutrales.

Los resultados mostraron que muchos perros se acercaban antes y mostraban comportamientos más sumisos o atentos cuando percibían a alguien llorar, en comparación con las otras emociones.
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¿Empatía o simple hábito aprendido?
La cuestión de si los perros sienten verdadera empatía sigue siendo un tema de debate. Por un lado, la neurociencia ha evidenciado que los perros pueden experimentar respuestas similares a las humanas ante emociones ajenas.

Por ejemplo, un estudio de la Universidad de Goldsmiths, en Londres, halló que los perros respondían más cuando una persona (sea su dueño u otra) estaba angustiada, sugiriendo que su respuesta va más allá de buscar consuelo solo por costumbre.
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Por otro lado, algunos expertos señalan que los perros pueden haber aprendido, a lo largo de miles de años de domesticación, que ciertos comportamientos —como acercarse cuando alguien está triste— pueden reforzarse con atención, caricias o alimento.
El poder de la conexión humano-canina
Independientemente de los motivos exactos, hay consenso en que la relación entre humanos y perros es especial.

El investigador Gregory Berns, de la Universidad de Emory, utilizó resonancias magnéticas para observar las respuestas cerebrales caninas ante la voz de sus dueños. Concluyó que los perros pueden reconocer las emociones humanas y que, probablemente, sienten algo similar a la empatía.
Además, estudios recientes demuestran que el simple contacto visual entre un perro y su humano puede elevar los niveles de oxitocina —la “hormona del amor”— en ambos, creando un círculo de apego emocional que potencia la comprensión mutua.
¿Qué siente tu perro cuando llorás?
Si bien no podemos asegurar que nuestros perros comprendan la razón exacta de nuestra tristeza, la ciencia confirma que ellos perciben nuestras emociones y, muchas veces, tratan de consolarnos a su manera. Su empatía —ya sea innata o aprendida— es un recordatorio del lazo único que compartimos.

La próxima vez que tu perro se quede a tu lado mientras llorás, podés estar seguro de que, al menos, te está diciendo: “Estoy aquí con vos”. Una expresión silenciosa de compañía que, apoyada por la ciencia, reafirma por qué decimos que el perro es el mejor amigo del hombre.