La diabetes mellitus es una enfermedad cada vez más común en perros y gatos, y puede comprometer seriamente su salud si no se detecta y trata a tiempo. Reconocer los signos tempranos y aprender a manejar la enfermedad desde casa es fundamental para garantizarles una vida larga, activa y feliz.
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¿Qué es la diabetes en mascotas?

Se trata de un trastorno metabólico en el que el cuerpo no produce suficiente insulina o no puede usarla correctamente.
- En perros, suele presentarse como diabetes tipo 1 (dependiente de insulina).
- En gatos, es más frecuente la tipo 2 (resistencia a la insulina), especialmente en gatos mayores o con sobrepeso.
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Principales síntomas de diabetes en perros y gatos

Estar atento a estos cambios es clave para actuar a tiempo:
- Sed excesiva y orina abundante
- Pérdida de peso sin explicación
- Apetito elevado
- Letargo o debilidad
- Infecciones urinarias frecuentes, especialmente en gatos
Si tu mascota presenta alguno de estos síntomas, consultá al veterinario para confirmar el diagnóstico mediante análisis de sangre y orina.
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Cómo manejar la diabetes en casa
Una vez diagnosticada, la diabetes en mascotas se puede controlar eficazmente con compromiso y seguimiento.
Aplicación de insulina: casi todos los perros y muchos gatos requerirán inyecciones diarias. El veterinario te enseñará cómo administrarlas con seguridad.
Alimentación específica. Las dietas recomendadas suelen ser:
- Altas en fibra (en perros)
- Bajas en carbohidratos (en gatos). Evitá los cambios bruscos y controlá las porciones. Mantener un peso saludable es crucial.
Monitoreo de glucosa: se puede hacer en casa con un glucómetro adaptado para mascotas. Esto ayuda a ajustar la dosis de insulina y evitar hipoglucemias.
Ejercicio regular: la actividad física diaria, adaptada a la edad y condición de la mascota, mejora la respuesta a la insulina y ayuda a estabilizar los niveles de azúcar.
Registro diario: anotá cada dosis, niveles de glucosa, comidas y actividad. Este seguimiento será clave para evaluar la evolución y ajustar el tratamiento.
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Un diagnóstico no es el final
La diabetes no es una sentencia: con el tratamiento adecuado y tu cuidado diario, tu perro o gato puede disfrutar de una excelente calidad de vida. Ante cualquier duda o cambio en su comportamiento, acudí al veterinario. Tu atención es la mejor medicina para tu mascota.