Cómo es el perro Setter Irlandés
El Setter Irlandés es conocido por su distintivo pelaje de longitud media, que es liso y sedoso al tacto. Este característico pelaje actúa como una capa protectora, adecuada para las condiciones climáticas donde históricamente ha sido utilizado como perro de caza.
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Sus ojos expresivos y orejas largas y caídas le confieren un aspecto amable y amigable.

Generalmente, los machos son ligeramente más grandes que las hembras, con una altura que varía entre 58 y 67 centímetros y un peso que oscila entre 25 y 32 kilogramos. Su estructura esbelta y músculos bien desarrollados le permiten un movimiento ágil y veloz.
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Temperamento y comportamiento
Los Setter Irlandeses son conocidos por su vivacidad y su buen carácter. Son perros extremadamente sociables, afectuosos y deseosos de complacer a sus dueños.
Su naturaleza amistosa los hace excelentes mascotas familiares y se llevan bien con los niños y otros animales.

Sin embargo, su elevada energía requiere de mucho ejercicio diario. Son perros que disfrutan de largas caminatas, correr y jugar al aire libre.
Su inteligencia también demanda estimulación mental, por lo que es recomendable involucrarlos en actividades que desafíen su mente.
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Cuidados y mantenimiento del Setter Irlandés
Debido a su herencia como perros de caza, los Setter Irlandeses necesitan una cantidad considerable de ejercicio diario.
Es recomendable ofrecerles al menos una hora de actividad física intensa, lo que no solo mantendrá su salud física en óptimas condiciones, sino que también ayudará a prevenir conductas destructivas derivadas del aburrimiento.

La alimentación debe ser equilibrada y adecuada para su tamaño y nivel de actividad. Se recomienda una dieta rica en proteínas de calidad, junto con los nutrientes esenciales para mantener su pelaje brillante y su sistema muscular robusto.
Por otro lado, el mantenimiento de su pelaje requiere un cepillado regular para evitar enredos y mantener su aspecto sedoso. Es aconsejable bañarlos cuando sea necesario y revisar sus oídos para prevenir infecciones, algo a lo que son propensos debido a sus largas orejas.
Historia y origen del Setter Irlandés
El Setter Irlandés se originó en Irlanda durante el siglo XVIII. Inicialmente, fue criado para ayudar en la caza de aves gracias a su capacidad para detectar y señalar la presencia de presas.
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Tradicionalmente, esta raza trabajaba en terrenos difíciles, lo que ha contribuido a su resistencia y agilidad.

Con el tiempo, el Setter Irlandés se ha convertido en una de las razas favoritas tanto para la cacería como para la compañía, siendo un habitual ganador en concursos de belleza canina.