“Soy Canela, libre y feliz”

Así parece decir esta perrita de 4 años, la perruna influencer Caneladelbarrio, según su perfil en instagram. Se mudó a su nueva casa en el barrio Las Mercedes donde tiene todo para sentirse bien y a gusto, pero no hay caso, es farrista, cada noche desaparece, encuentra la forma de escapar y pasear a sus anchas.

Sus recorridos nocturnos la han hecho conocida en los locales pets friendly.
Así parece decir esta perrita de 4 años, la perruna influencer Caneladelbarrio, según su sitio en instagram. Se mudó al barrio Las Mercedes donde tiene todo para sentirse bien y a gusto, pero no hay caso, cada noche desaparece, encuentra la forma de escapar y pasear a sus anchas.Gentileza

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“Es su destino, ella es libre y feliz”, afirma su propietaria Tania que nos contó cómo Canela se convirtió en Caneladelbarrio en su red social.

Sus amigos la reconocen y le miman.
Una mascota sociable.

Canela a la que no piensan “castrarle su libertad” desaparece todas las noches, no importa cuanta seguridad pongan al portón.

La conocen en el barrio Las Mercedes, y los locales pets friendly le dejan pasar, le convidan asado, la carne que le encanta, desde luego.

Son expresiones que llegan a diario.
Los seguidores dejan mensajes cariñosos para Canela.

Tan acostumbrada está a “vagar” que llora cuando se le encierra, según su mami, que explicó que en su casa tiene todo, comida balanceada, su casita, baños cada 15 días pero su espíritu libre se impone.

“Soy Canela y me encanta la farra”

Canela es mestiza, de labradora y chorizo, es guardiana y pendiente de cuidar a los demás. Es súper cazadora pero le encanta la farra.

“Mucha gente la recibe en su casa, y luego me avisan, gracias a su collar con los datos, le toman fotos que alzan a instagram”, según comentó su dueña.

A esta perrita le encanta estar con la gente y otros canes. “Nos rendimos ante su libertad, este es su destino, ella encuentra la forma de salir, hizo un hueco debajo del portón”, refirió.

Todos los videos y fotos son de sus seguidores que la etiquetan, y ahí queda su historia nocturna que no deja de asombrar.

“Soy Canela, la paseandera”

A eso de las 2 de la mañana, cuando cierran los locales nocturnos Canela vuelve a su casa, a veces en compañía de su amigo perruno Terry, como si nada.

Su familia solo tiene palabras de agradecimiento por la generosidad de las personas, por el respeto y el cuidado que le brindan. Prefieren verla contenta antes que “atada”, y no piensan ponerle barreras a sus deseos de salir.

Le preguntamos a Tania si no es peligroso que ella agreda a otros o que reciba malos tratos, y fue tajante: “Canela tiene mucha vida social, tiene muchas historias y aunque alguna vez le ladra a quien no le agrada hasta ahora solo ha cosechado amigos”.

Hace poco fue su cumpleaños y sus seguidores reservaron una mesa para festejarlo. Sus seguidores no dejan de escribir hermosos mensajes de cariño.

Será porque Canela fue adoptada y ha recibido amor sin condiciones.

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