Eso advirtió este miércoles la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini.
Estos anuncios, como la construcción de 3.000 viviendas en la Cisjordania ocupada, “marca una tendencia preocupante y plantea un desafío directo a la perspectiva de una solución de dos Estados viable, que es cada vez más difícil y puede volverse imposible”, indicó Mogherini en un comunicado.
Desde la investidura del nuevo presidente estadounidense el 20 de enero, Israel anunció la construcción de más de 6.000 viviendas en Cisjordania y Jerusalén Este, ocupadas y anexada.
Los 3.000 nuevos asentamientos anunciados el miércoles de madrugada parecen ser una concesión adicional a los partidarios de la colonización, coincidiendo con el inicio de la evacuación de Amona, una colonia objeto de un álgido debate en Israel.
La jefa de la diplomacia europea reiteró que la UE “se opone firmemente a esta política” de colonización, que es “ilegal en virtud del derecho internacional” y va en contra “directamente” de las recomendaciones del Cuarteto de Oriente Medio (ONU, UE, Rusia y Estados Unidos).
“Una solución negociada de dos Estados es el único camino para satisfacer las aspiraciones legítimas de ambas partes y lograr una paz duradera”, añadió.