El sábado en la tarde, los aviones del régimen realizaron algunos ataques aéreos sólo cerca de Duma, la gran ciudad de Guta, tras una interrupción desde el viernes en la noche, indicó el OSDH.
“Prácticamente no hay ataques aéreos, incluso los ataques de artillería han sido mucho menos intensos”, precisó a la AFP el director del OSDH, Rami Abdel Rahman.
No obstante, los disparos de la artillería dejaron cinco heridos el sábado en Guta, según indicó la misma fuente. En las localidades y pueblos bombardeados desde hace cinco días, especialmente en Duma, Hamuriyé y Arbin, algunas tiendas reabrieron sus puertas el sábado, constataron corresponsales de la AFP.
Los habitantes volvieron muy tímidamente a las calles, algunos para limpar los escombros alrededor de sus viviendas, otros con el fin de intentar recuperar cosas de sus hogares completamente destruidos, observaron los periodistas.
Desde el lunes, miles de familias tuvieron que huir a refugios subterráneos. Médicos y socorristas se vieron desbordados por la gran afluencia de víctimas que a diario dejó decenas de muertos y heridos, entre ellos mujeres y niños.
En represalia a los ataques en Guta, los rebeldes lanzaron disparos de artillería contra la capital. El sábado un cohete que cayó en Damasco provocó un incendio en una central eléctrica, según informó la agencia oficial.
Asediados desde 2013 por las fuerzas del régimen, los 400.000 habitantes de Guta oriental sufren escasez de comida y de medicamentos y hay niños en peligro de muerte por desnutrición.
Por otra parte, más de 30 yihadistas del grupo Estado Islámico (EI) murieron en combates con las fuerzas del régimen sirio en la provincia de Idlib (noroeste), según el OSDH.
El grupo yihadista había logrado regresar de forma discreta al sudeste de dicha provincia, aprovechando los combates entre el régmen de Al Asad y otra organización yihadista, Hayat Tahrir al Sham, un movimiento dominado por la exrama de Al Qaeda.
“Los enfrentamientos violentos entre un grupo del EI y las fuerzas del régimen se saldaron con 32 muertos” en las filas de la organización yihadista, según el director del OSDH.