Los restos pertenecen a Luis Agustín Santillán, un joven de la norteña provincia de Salta que en 1975 cursaba la tecnicatura de radiología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Córdoba (centro), confirmó el juez Miguel Hugo Vaca Narvaja, según publica la agencia Télam.
Los fragmentos óseos fueron encontrados el año pasado en unos hornos ubicados en el predio donde funcionó, durante la dictadura militar argentina (1976-1983), el centro clandestino de detención “La Perla”, el principal centro fuera de Buenos Aires y por donde pasaron unos 3.000 detenidos.
El joven fue secuestrado el 6 de diciembre de 1975, antes del golpe de Estado que sufrió Argentina en 1976, junto a Rosa Gómez Granja, Alfredo Felipe Sinópoli y Ricardo Saibene, todos estudiantes y militantes de la Juventud Universitaria Peronista (JUP).
Los restos de esos tres estudiantes ya fueron identificados el 20 de marzo pasado, pero la confirmación del cuarto perfil genético demoró hasta obtenerse la muestra de sangre de los familiares de Santillán.
Antes de ser asesinados, los cuatro estudiantes fueron torturados en el centro clandestino “Campo de la Ribera”, también ubicado en Córdoba y que ya funcionaba a fines de 1975.
Luego, los restos mortales fueron quemados en los hornos de la zona de La Ochoa, ubicados a unos siete kilómetros de los edificios de La Perla, donde fueron encontrados en octubre de 2014.
Tras el hallazgo, el exmilitar Ernesto Barreiro, juzgado actualmente en la causa por La Perla, “entregó una lista de nombres de desaparecidos enterrados en ese lugar, entre los que se encontraban los de los cuatro estudiantes”, según dijo Vaca Narvaja y publica hoy el diario argentino Página/12.
“Esto refuerza la idea de que ellos tienen un registro de los desaparecidos y dónde están sus cuerpos”, añadió el magistrado.