La acción forma parte de la “Operación Atlántico III”, que tiene por objetivo la preparación de los militares para la defensa de una zona que las autoridades brasileñas denominan “Amazonía Azul” y que comprende las ricas reservas de gas y petróleo del presal, informó el Ministerio de Defensa en una nota oficial.
En las maniobras participarán 10.000 soldados del Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea, que a partir del próximo lunes realizarán ejercicios de vigilancia marítima y defensa costera tanto en torno a las regiones petrolíferas del océano Atlántico como en el litoral terrestre frente a esas reservas.
En las prácticas serán utilizados siete buques de guerra, dos submarinos, siete helicópteros, cuatro aviones de combate, cinco de patrulla y cinco de transporte, además de unos 200 vehículos del Ejército.
El llamado presal es un nuevo horizonte petrolero que se extiende sobre una franja de 800 kilómetros de largo por 200 de ancho y que se calcula que esconde reservas de unos 80.000 millones de barriles de crudo.
Esa riqueza petrolera, sin embargo, representa enormes desafíos tecnológicos, pues se sitúa en promedio a unos 150 kilómetros de la costa y a profundidades que varían entre 5.000 y 7.000 metros, bajo unas costras salinas con altas temperaturas de un espesor que va de 300 a 2.000 metros.