Ambos jerarcas, que se reunieron el viernes en Singapur, quieren de esa manera “darle al proceso diplomático (con Corea del Norte) todas las oportunidades de avanzar”, dijo White en un comunicado publicado en Washington.
El comunicado agrega que “los dos ministros están determinados a modificar las maniobras militares para asegurarse de la buena preparación de las fuerzas” de ambos países, una formulación que deja entender que ejercicios diferentes y de menor porte podrían tener lugar de todas maneras.
Los dos gobiernos “se comprometieron a coordinarse estrechamente”, continuó White, y precisó que Mattis había informado a su par japonés Takeshi Iwaya sobre la decisión.
Vigilant Ace es un ejercicio aéreo que tiene lugar todos los años a comienzos de diciembre en Corea del Sur para mejorar la coordinación entre ambas fuerzas armadas.
En 2017, contó con la participación de 230 aviones y unos 12.000 soldados estadounidenses y surcoreanos.