Morales confirmó en un discurso que la misión está formada por expresidentes y excancilleres, ministros y otros asesores y, además, ordenó a todas las entidades públicas izar banderas para acompañar simbólicamente desde Bolivia el trabajo de la delegación en La Haya.
La delegación está encabezada por el canciller boliviano, David Choquehuanca, e integrada, entre otros, por el expresidente y portavoz de la causa marítima Carlos Mesa (2003-2005) y los excancilleres Javier Murillo, Gustavo Fernández y Armando Loaiza, actual embajador boliviano ante el Vaticano.
La CIJ convocó a Chile a presentar sus alegatos orales el 4 y 7 de mayo y a Bolivia, el 6 y 8 del mismo mes sobre la objeción chilena acerca de su jurisdicción para tratar el histórico reclamo boliviano de una restitución de la salida al mar perdida en 1879.
Morales insistió hoy en que “desconocer la competencia de un organismo internacional creado por la humanidad como las Naciones Unidas es desconocer el derecho internacional”.
Desconocer la competencia de la CIJ “es desconocer la vivencia en paz y con justicia social resolviendo las controversias”, agregó, en alusión a la objeción preliminar presentada por Chile.
Bolivia perdió 400 kilómetros de costa y 120.000 kilómetros de territorio en 1879 frente a tropas chilenas, que ocuparon esa región antes de declarar oficialmente una guerra, según ha defendido varias veces el presidente Morales.
La demanda boliviana fue planteada en 2013 en busca de que la Corte de La Haya emita un fallo que obligue a Chile a negociar en firme y de buena fe la reclamación boliviana de obtener una reintegración soberana de la salida al Pacífico.
El argumento boliviano sostiene que varios gobiernos chilenos ofrecieron oficialmente a Bolivia solucionar la controversia, pero nunca se concretaron las soluciones.
“Esos ofrecimientos, esos compromisos deben ser cumplidos. Esa es la demanda fundamental que Bolivia plantea ante el organismo internacional”, sostuvo el mandatario.
Chile ha rechazado la demanda boliviana con el argumento de que los límites territoriales quedaron sellados en un tratado de 1904, veinticinco años después de finalizada la guerra del Pacífico.