Franco, política de izquierdas, negra y activista de derechos humanos, fue tiroteada la noche del pasado 14 de marzo, cuando transitaba en un vehículo por una calle del centro de la ciudad, tras haber participado en un acto político. En el ataque también murió el conductor de su vehículo mientras que una asesora de la concejala resultó herida sin gravedad.
Desde entonces, las investigaciones por el brutal crimen que acabó con la vida de Franco, de 38 años y socióloga de profesión, se desarrollan en sigilo, si bien las autoridades han dejado entrever algunas pistas. A pesar de que varias de las cámaras de seguridad instaladas en el trayecto que recorrió esa noche la concejala estaban desactivadas, la Policía piensa que en el homicidio participó un segundo vehículo que cubrió a los asesinos que se movilizaban en otro auto.
Sin embargo, una de las hipótesis que más ha tomado fuerza es la de la participación de milicias ya que, según peritos del Departamento de Homicidios, citados por medios locales, los casquillos de bala recogidos en el lugar de los hechos pertenecen a proyectiles de un lote adquirido por la Policía Federal en 2006.
El ministro de Seguridad Pública, Raúl Jungmann, dijo entonces que esas balas habían sido robadas de una oficina de correos, lo que fue desmentido por la entidad. Marielle, nacida y criada en Maré una de las favelas más pobres de Río, fue la quinta más votada en las elecciones de 2016 para el Concejo de Río y era una ferviente activista, conocida por sus denuncias contra los excesos de la Policía y sus críticas a la intervención en la seguridad de Río.
Los investigadores también analizan si la muerte de Marielle tiene relación con el reciente asesinato de Alexandre Pereira, líder comunitario y colaborador del concejal Marcelo Siciliano, del Partido Humanista de Solidadridad (PHS).
Frente a la falta de resultados concretos en las investigaciones, Amnistía Internacional (AI) pidió hoy a las autoridades brasileñas “dar prioridad” a la resolución de estos asesinatos. “La sociedad tiene que saber quién mató a Marielle y por qué”, señaló Jurema Werneck, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Brasil, citada en una nota.
Para recordar la figura de Marielle y Anderson y exigir justicia, este sábado desde las 6.00 hora local (9.00 GMT) se realizará una serie de eventos en Brasil y en otros países del mundo.
Llenar de color las calles con tejidos, cintas, pinturas y flores, organizar eventos culturales y marchar con carteleras y mosaicos que recuerden a Marielle y a Anderson, son algunas de las propuestas de quienes organizan este evento transnacional.
“¡Más de 80 puntos en 8 países van a amanecer por Marielle y por Anderson este sábado! 30 días después del asesinato que dejó a Brasil llorando, nos uniremos en memoria de nuestros compañeros y para cobrar respuestas”, señaló desde su cuenta en Twitter, el diputado del izquierdista Partido Socialismo y Libertad (PSOL), Marcelo Freixo, amigo personal de la concejala asesinada.
Dentro de las actividades que se desarrollarán en Río, se encuentra una ocupación en los Arcos de Lapa, seguida de una marcha con tambores hacia el barrio Estácio, lugar donde la concejala y su conductor fueron asesinados.
En Brasilia habrá un encuentro cultural con artistas femeninas en la Plaza del Ciudadano. Fuera del país, en Portugal, dos eventos están programados para este viernes y para el sábado, con actividades que incluyen foros femeninos de opinión, programas audiovisuales, talleres y espectáculos artísticos.
En las redes sociales, un “tuitaço” está marcado para este sábado y durante todo el día y de manera global, se utilizará el hashtag #QuemMatouMarielle con el objetivo de convertirlo en uno de los temas más comentados en Twitter (Trending Topic) .