Sólo en 2013 los pagos totalizaron 66 millones de dólares, según una investigación realizada por el periódico publicada el martes.
Aunque Al Qaida estaba al principio financiada por grandes donantes, “el secuestro por rescate se ha convertido hoy en la más importante fuente de financiamiento del terrorismo”, dijo David S. Cohen, subsecretario del Departamento del Tesoro para terrorismo e inteligencia financiera, en un discurso en 2012.
“Cada transacción motiva otra transacción”, destacó.
La organización reconoció abiertamente esta táctica, señaló la publicación.
“Secuestrar es un botín fácil, que podría describir como un negocio rentable y un tesoro precioso”, escribió Nasser al Wuhayshi, el líder de Al Qaida para la península arábiga.
Al Wuhayshi señaló que el dinero de los rescates -que en casos recientes alcanzaron a 10 millones de dólares por víctima- representa hasta la mitad de su presupuesto.
El diario detalló que más de 90 millones de dólares fueron pagos desde 2008 en el Magreb Islámico por Suiza, España, Austria, una firma controlada por el Estado francés y dos pagos más de fuentes no determinadas.
Los insurgentes somalíes shebab recibieron 5,1 millones de España, mientras que Al Qaida en la península arábiga recibió cerca de 30 millones en dos pagos, uno de Qatar y Oman y otro de un origen no precisado.
Austria, Francia, Alemania, Italia y Suiza siempre han negado haber pagado rescates por secuestrados.
Sin embargo, un ex alto responsable de la inteligencia francesa declaró el año pasado a la AFP , bajo condición de anonimato, que “los gobiernos y las empresas pagan en casi todos los casos”.
Citando a exsecuestrados, negociadores, diplomáticos y altos funcionarios de 10 países europeos, africanos y de Medio Oriente, el Times señala que muchas veces los pagos se disfrazan de ayuda para el desarrollo.
Los países europeos “pagan rescates y luego lo niegan”, una política que “nos hace vulnerables a todos”, señaló Vicki Huddleston, exembajadora norteamericana en Mali en 2003, al Times.
Estados Unidos y Gran Bretaña se han negado a pagar por la liberación de secuestrados, destacó el diario, con el resultado de que pocos han sido rescatados en operaciones militares o logrado escapar.