El velero de la Coalición de la Flotilla de la Libertad (FFC), un movimiento internacional no violento de solidaridad con los palestinos, zarpó de Italia el 1 de junio con el objetivo de entregar ayuda a la Franja de Gaza.
“Se perdió la comunicación con el Madleen. El ejército israelí ha abordado el barco”, dijo la FFC en Telegram. Afirmó que la tripulación fue “secuestrada por las fuerzas israelíes”.
La AFP no pudo contactar a alguna de las personas a bordo.
Pero Mahmud Abu Odeh, portavoz de la oenegé, dijo a AFP que “al parecer los activistas fueron arrestados”.
El Ministerio de Relaciones Exteriores israelí informó que su marina desvió el barco a las costas israelíes.
“El ‘yate de selfies’ de las ‘celebridades’ está navegando de manera segura a las costas de Israel. Se espera que los pasajeros regresen a sus países de origen”, publicó el ministerio en sus redes sociales.
“La diminuta cantidad de ayuda en el yate que no fue consumida por las ‘celebridades’ será transferida a Gaza por los canales humanitarios reales”, agregó el ministerio.
El territorio palestino, gobernado por Hamás, enfrenta un bloqueo israelí desde antes del inicio de la actual guerra, desencadenada tras el ataque de Hamás en el sur de Israel el 7 de octubre de 2023.
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“Provocación mediática”
A bordo del barco hay ciudadanos de Alemania, Francia, Brasil, Turquía, Suecia, España y Países Bajos, quienes esperaban llegar a la Franja de Gaza la mañana del lunes.
Entre ellos está, además de Thunberg, la eurodiputada francesa Rima Hassan.
Los activista dijeron en X que anticipan ser interceptados y “atacados” por Israel, y pidieron a sus gobiernos protegerlos.
El gobierno israelí acusó el lunes a “Greta Thunberg y los otros de intentar montar una provocación mediática con la única intención hacer publicidad”.
En mayo, otro barco de la Flotilla de la Libertad denunció haber sido atacado con drones.
Israel enfrenta fuerte presión internacional para poner fin a la guerra en Gaza, cuya población es bombardeada a diario, y la ONU advirtió que está en riesgo de hambruna por las restricciones israelíes a la ayuda.
En Gaza, la Defensa Civil informó que los ataques israelíes mataron a al menos 10 personas este domingo.
Los civiles se dirigían a un centro de distribución de ayuda al oeste de Rafah, en el sur de Gaza, gestionado por la Fundación Humanitaria de Gaza (GHF), contaron testigos.
El organismo, con una financiación opaca respaldada por Estados Unidos e Israel, es objeto de críticas de la ONU y de varias organizaciones humanitarias, que se niegan a trabajar con ella.
El ejército israelí dijo que disparó contra personas que “siguieron avanzando de forma que ponían en peligro a los soldados” a pesar de las advertencias.
La GHF aseguró en un comunicado que no hubo incidentes ni heridos “en ninguno de los tres sitios” que gestiona el organismo.