Alrededor de las 15.00 hora local (12.00 GMT) la gente empezó a congregarse en el parque Liberty Bell, donde el líder de la oposición, Yair Lapid, pronunció un breve discurso en el que criticó a varios políticos de la coalición gobernante que han expresado opiniones homófobas.
Los asistentes comenzaron entonces a formar grupos (comunistas, pacifistas, antigubernamentales) y a desfilar por Jerusalén de camino al céntrico parque de la Independencia mientras coreaban consignas al ritmo de los tambores.
La marcha de este año estuvo dedicada a Shira Banki, una adolescente de 15 años que fue asesinada durante la marcha del Orgullo de Jerusalén de hace diez años por un extremista judío ultrarreligioso. Otras seis personas resultaron heridas en el ataque, que conmocionó al país.
Jack, un canadiense que acudió hoy a la marcha de Jerusalén, dijo a EFE que su principal motivo para venir era “expandir la tolerancia, el entendimiento y la libertad en Israel”.
El hombre estuvo en la marcha de hace dos años, cuando Benjamín Netanyahu acababa de volver al poder al frente de una inédita coalición con la extrema derecha, y dijo que, entonces, la temática del evento fue puramente contra el Gobierno.
Este año, aclara, la gente ha acudido “por el Gobierno y por el Orgullo”.

Junto al recorrido de la marcha, claramente delimitado por vallas metálicas entrelazadas, la presencia policial era constante: guardias armados, policía montada, drones, vehículos militarizados.
Sofia, una joven israelí que salió hace poco del armario, explica que le costó mucho encontrar una comunidad en la que sentirse cómoda, y que sus interacciones en internet con miembros de la comunidad LGTB le han hecho sentirse muy bienvenida.

“Me parecía muy importante venir para conocer a más gente con la que pueda sentirme cómoda. No tengo que preocuparme por quién soy, cómo tengo que actuar”, reconoce.
El presidente de Israel, Isaac Herzog, acudió hoy al lugar en el que Banki fue asesinada, acompañado de los padres de la joven. Es la primera vez que un presidente israelí participa en una marcha del Orgullo.

“Desde aquí, pido a todo el pueblo israelí que muestre moderación, amor y compasión. Al fin y al cabo, todos estamos destinados a vivir juntos, y esa es nuestra misión. Y quizás ese sea también el mensaje de la querida Shira”, dijo el mandatario, en declaraciones compartidas por su oficina.
Al evento acudieron también personas como Yehiel, un hombre de California que no pertenece a la comunidad LGTB pero al que le parecía importante acudir.
“Soy un aliado. Aunque no pertenezca a la comunidad quería venir a mostrar mi apoyo”, explica.