Esta es, desde que Israel rompiera el alto el fuego a finales de marzo, la cifra más alta de cuerpos que han llegado a los pocos hospitales que siguen funcionado en el enclave palestino.
Durante esta pasada noche, al menos una docena de viviendas del norte del enclave, entre ellas algunas del campo de refugiados de Yabalia y de la localidad de Beit Lahia, han sido bombardeadas por las fuerzas israelíes, confirmaron fuentes locales a EFE.
La agencia de noticias palestina, Wafa, informa de que estos bombardeos fueron acompañados de una incursión de las fuerzas israelíes en Beit Lahia. De momento, el Ejército no se ha pronunciado sobre sus últimos movimientos en el enclave.
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De estos últimos ataques contra el norte, los equipos de la Defensa civil gazatí han recuperado al menos 55 cuerpos, de los cuales once de ellos son de una misma familia.
Todos ellos han sido trasladados al abarrotado Hospital Indonesio y Al Awda, donde numerosos residentes se congregaron para identificar a los fallecidos.
Además, la Defensa Civil gazatí estima que al menos otros 50 cuerpos siguen bajo los escombros en el norte.
“Hay personas desaparecidas dentro de las casas atacadas a las que no hemos podido contactar. Todas las zonas de la Franja están siendo atacadas”, lamentó en un comunicado Mahmud Basal, portavoz de la Defensa Civil gazatí.