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La relación entre Jair Bolsonaro, expresidente de Brasil, y Mario Abdo Benítez, expresidente de Paraguay, se caracterizó, en general, por una cooperación estrecha y una alineación ideológica durante sus mandatos.
Ambos líderes, provenientes de espectros conservadores, encontraron terreno común en temas de política exterior y proyectos bilaterales, fortaleciendo los lazos entre Brasil y Paraguay. Esta sintonía se reflejó en múltiples encuentros y declaraciones conjuntas, en la que incluso Bolsonaro rindió homenaje al dictador paraguayo Alfredo Stroessner.
Ahora, tras una acusación presentada contra Abdo Benítez por la Fiscalía de Paraguay a raíz de una denuncia realizada por otro expresidente, Horacio Cartes, y contrincante político de Mario Abdo en las últimas internas coloradas, el exmandatario de Brasil demostró su apoyo reaccionando con un “me gusta” a la publicación del expresidente paraguayo en sus redes sociales.
Relación bilateral Bolsonaro - Abdo Benítez
Uno de los pilares de su relación fue la colaboración en proyectos de infraestructura, como el Puente de la Integración, que conecta Presidente Franco (Paraguay) con Foz de Yguazú (Brasil).
En diciembre de 2020, ambos presidentes visitaron las obras, financiadas por Itaipú Binacional, y Bolsonaro elogió a Abdo Benítez, llamándolo un “hermano” y destacando la relación como un “casamiento perfecto” entre los dos países.
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El salvataje de Bolsonaro a Mario Abdo ante un posible juicio político
En el ámbito energético, la represa de Itaipú, compartida por ambos países, fue un tema central. Aunque surgieron tensiones en 2019 por un acuerdo energético que amenazaba la soberanía paraguaya y puso a Abdo Benítez al borde de un juicio político.
Bolsonaro accedió a cancelarlo tras negociaciones, un gesto que salvó la estabilidad del líder paraguayo. Posteriormente, en 2021, ambos afirmaron estar avanzando en las negociaciones sobre las tarifas de Itaipú, mostrando disposición para resolver disputas y mantener una relación pragmática, aunque las discusiones finales quedaron para el mandato de Lula da Silva.
La crisis venezolana también unió a Bolsonaro y Abdo Benítez. Ambos apoyaron firmemente a Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela, rechazando a Nicolás Maduro.
En marzo de 2019, durante un encuentro en Brasilia, reafirmaron su compromiso con la “democracia” en Sudamérica, y Abdo Benítez participó activamente en esfuerzos regionales, como el intento de ingreso de ayuda humanitaria desde Cúcuta. Esta postura común reforzó su alianza ideológica y su alineación con potencias como Estados Unidos.
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A nivel personal, la relación entre ambos fue cordial y marcada por gestos de camaradería. Bolsonaro destacó en varias ocasiones el liderazgo de Abdo Benítez, alabando su dedicación a su pueblo, mientras que Abdo expresó satisfacción por trabajar con Bolsonaro y, más tarde, con Lula, mostrando flexibilidad diplomática.
Encuentros como el de noviembre de 2021 en Brasilia, donde abordaron temas como el narcotráfico y la seguridad fronteriza, evidenciaron una relación basada en confianza y objetivos compartidos.
