La cumbre es la reunión diplomática más importante en Rusia desde que Vladimir Putin mandó tropas a Ucrania en marzo de 2022, lo que desató las sanciones occidentales y la condena internacional.
El grupo de los Brics se creó en 2009 con cuatro miembros (Brasil, China, India y Rusia) y en 2010 se unió Sudáfrica. En 2024 otros cuatro países se sumaron al bloque (Etiopía, Irán, Egipto y Emiratos Árabes Unidos).
Cerca de 20 líderes mundiales, incluidos los de China, India, Turquía e Irán, se reúnen en la ciudad de Kazán, en el centro de Rusia, donde abordarán cuestiones como el desarrollo de un sistema de pago internacional liderado por los Brics o el conflicto en Oriente Medio.
Rusia considera los Brics como una alternativa a las organizaciones internacionales lideradas por Occidente como el G7, una posición respaldada por el presidente chino Xi Jinping, aliado clave de Moscú.
“El proceso de formación de un orden mundial multipolar está en marcha, es un proceso dinámico e irreversible”, dijo Putin en la inauguración oficial de la cumbre.
La organización de los Brics está “fortaleciendo su autoridad en las cuestiones internacionales”, aseguró, pidiendo a sus miembros que consideren cómo pueden abordar los problemas más acuciantes de la agenda global, incluidos los “conflictos regionales graves”.
Reunión con secretario de la ONU
El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, llegó a Rusia para asistir a la cumbre, en su primera visita al país en más de dos años, muy criticada por Ucrania.
En conversaciones bilaterales el martes con Xi y el primer ministro indio, Narendra Modi, Putin elogió las “asociaciones estratégicas” de Rusia con sus socios.
Xi, por su parte, habló de los lazos “profundos” de China con Rusia en lo que llamó un mundo “caótico”.
Las relaciones de Rusia y China han “inyectado un fuerte impulso al desarrollo, revitalización y modernización de los dos países”, dijo Xi.