“Creo que en esta segunda cumbre deberían de participar representantes rusos” , afirmó el mandatario ucraniano en una rueda de prensa en Kiev, añadiendo que espera que un “plan” para dicha reunión esté listo en noviembre.
No mencionó el cese de las hostilidades sino el establecimiento de un plan sobre tres temas: la seguridad energética de Ucrania -cuya infraestructura fue devastada por los bombardeos rusos-, la libre navegación en el mar Negro y el intercambio de prisioneros.
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Rusia aún ocupa cerca del 20% del territorio ucraniano y las perspectivas de un alto el fuego, e incluso de una paz duradera entre Kiev y Moscú, son mínimas en esta etapa después de casi dos años y medio de ataque a gran escala ruso.
Sin embargo es la primera vez que Zelenski plantea la idea de conversaciones con Rusia sin la retirada previa de sus tropas del territorio ucraniano.
Suavizar el discurso
En el pasado había jurado no querer negociar con Moscú mientras Vladimir Putin estuviera en el poder e incluso firmó un decreto que hacía ilegales las negociaciones con Moscú.
Ucrania afirma regularmente querer recuperar todos los territorios ocupados por Rusia, incluida la península de Crimea, anexada por Moscú en 2014.
La condición sine qua non para Kiev antes de cualquier discusión de paz es la retirada total de las fuerzas rusas actualmente presentes en suelo ucraniano, es decir cerca de 700.000 militares, según las cifras presentadas por Putin.
El presidente ruso, que atacó Ucrania en febrero de 2022, reiteró en múltiples ocasiones que sus “condiciones” son el abandono de las cuatro regiones -cuya anexión Moscú reclama además de Crimea-, y la garantía de que Kiev renuncie a unirse a la OTAN.
Estas exigencias fueron rechazadas por Kiev y sus aliados occidentales.
Primera cumbre, sin éxito
Se organizó una primera cumbre sobre la paz en Ucrania a mediados de junio en Suiza.
Un centenar de países estuvieron representados pero Rusia no fue invitada y China, aliado diplomático y económico de Moscú, decidió no participar.
Ucrania ya había propuesto en 2022 un plan de paz de 10 puntos, apoyado por Occidente, que implicaba la retirada incondicional de las fuerzas rusas del territorio ucraniano. Propuesta rechazada por Moscú.