La reducción de la alerta se había dado el 20 de junio en la franja central del país, dejando la alerta roja en la zona norte y en la costa, este cambio implica la habilitación de la pesca artesanal, industrial y deportiva desde el domingo bajo precaución.
También se permitirían las actividades de recreación en ríos, playas y lagos, señaló la dirección de Protección Civil.
Las cifras oficiales indican que entre las 19 personas fallecidas se encuentran 13 adultos y 6 menores de edad, mientras que los socorristas realizan labores de búsqueda y rescate de una persona arrastrada por un río en la capital.
Los heridos llegaron a 12 en estos ocho días, mientras que los evacuados sumaron a 4.230, de los que 2.012 son menores de edad.
En esta semana de lluvias, son 28 ríos los que se han desbordado, se han dado 335 deslizamientos, 28 inundaciones urbanas y 233 viviendas dañadas.
A pesar de la reducción de la alerta, El Salvador se mantiene en estado de emergencia nacional decretado por el Congreso el 16 de junio por un período de 15 días.
De acuerdo con el pronóstico del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), "se estima probabilidad de 50 % de formar otra depresión tropical para 48 horas y 60 % en 7 días" y que esta arrastre humedad del Océano Pacífico hacia El Salvador.
"Desde este sábado 22 de junio, comenzará a apreciarse un cambio paulatino en el patrón de lluvias de temporal retornando gradualmente a condiciones más típicas de la época lluviosa", sostuvo el MARN.
Históricamente, El Salvador se ha visto afectado por fenómenos meteorológicos que dejan varias muertes en cada época lluviosa, entre los más fuertes se encuentran el huracán Mitch (1998) y las lluvias de noviembre de 2009.
Mitch dejó a su paso 240 fallecidos y 84.005 damnificados, mientras que las tormentas del 7 y 8 de noviembre de 2009 dejaron 199 muertes.