El informe sobre el comportamiento de jóvenes, que analiza 44 países y regiones europeas, revela que mientras las tendencias generales de acoso escolar se han mantenido estables desde 2018, el ciberacoso ha aumentado por la mayor digitalización de las interacciones “con impactos potenciales profundos en sus vidas”.
En el caso de los niños, el porcentaje de acosos cibernéticos ha pasado del 12 al 15% y, en el de las niñas, del 13 al 16%. Los últimos datos, correspondientes a 2022, reflejan también una subida en el porcentaje de ciberacosadores: del 12 al 14% en niños, del 7 al 9% en niñas.
Estas cifras resaltan la “urgente necesidad” de intervenciones que involucren a educadores, padres, líderes comunitarios y políticas para impulsar la competencia y la seguridad digitales, advierte OMS-Europa.
“Los jóvenes pasan hasta seis horas conectados al día por lo que pequeños cambios en las tasas de acoso y violencia pueden tener profundas implicaciones para la salud y el bienestar de miles”, señala el director de la oficina europea de la OMS, Hans Kluge, que menciona desde episodios de autolesiones a suicidios.
Lea más: La violencia digital de género como forma de censura
Mayor tendencia al acoso de los niños
El estudio revela que los niños muestran una mayor tendencia a la agresión y la lucha que las niñas, lo que requiere incidir en interacciones de regulación de las emociones y sociales.
El aumento de niñas acosadoras exige soluciones que promuevan la seguridad digital, empatía y la cultura de la inclusión, advierte OMS-Europa.
Según los datos de este organismo, el 6% de los adolescentes acosa a otros en las escuelas, 8% en el caso de niños y 5% en el de niñas; mientras el 11% ha sufrido episodios de ese tipo, sin que haya diferencias significativas entre sexos.
Uno de cada de diez adolescentes ha participado en peleas, porcentaje que sube al 14% para los niños y baja al 6% para las niñas.
Lea más: Violencia digital contra las mujeres: basta de complicidad con los agresores