Durante la promoción en España de la película Ferrari, Cruz hizo estas declaraciones tras las recientes acusaciones de violencia sexual contra dos directores de cine español, Carlos Vermut y Armando Ravelo, por parte de actrices y trabajadoras del sector cultural español.
Tanto le preocupa este tema que el documental que prepara y que será su debut como realizadora -con la excepción de dos anuncios- se centrará en las mujeres, aunque no específicamente en el maltrato.
"Estoy desarrollando una película sobre estos temas, porque son temas que me importan de verdad y me da muchísima rabia y pena que sigan muriendo tantas mujeres en nuestro país y en tantos lugares del mundo", aseguró la intérprete.
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Pero incidió en que es un problema que no se circunscribe al cine. “Pasa aquí y en cualquier lugar del mundo (...) con enfermeras, maestras, amas de casa, señoras de la limpieza, el periodismo, la literatura, es por todas partes”.
La diferencia, a juicio de la actriz madrileña, es que a las actrices les ponen un micrófono y les preguntan por el tema, pero a otras mujeres no. Por eso no quiere hacer una película centrada en el mundo del cine.
"Llevo un año trabajando en mi documental del que todavía no puedo hablar, porque me quedan dos años más por lo menos, es complejo y necesita tiempo, no me gustaría hablar de ello hasta tenerlo terminado", dijo además en una entrevista con EFE en la que aseguró que le está poniendo "mucho cariño" a este proyecto, que necesita "mucha calma".
En un encuentro posterior con los medios de comunicación apuntó que este trabajo, que será su ópera prima como directora, trata sobre las mujeres aunque no directamente sobre el maltrato. "Tiene que ver con la mujer pero habla de otra cosa".
Y a preguntas sobre el movimiento #MeToo en el cine, precisó que “es un proceso que nunca se dijo que iba a ser corto o sencillo y estamos todavía muy lejos de llegar a un lugar de igualdad”.
Asimismo, la actriz destacó que en España las mujeres encuentran la fuerza "descomunal para atreverse a hablar" pero cree que "el sistema legal falla".
“Es muy difícil para una mujer que está viviendo una situación de tortura, de malos tratos, gente que está viviendo un infierno, con hijos, que no tienen escapatoria del pasado porque no tienen ni a donde ir. Yo conozco a varias, sé sus nombres y apellidos y he visto cosas pero muy fuertes y no les han dado la protección necesaria, y no las han escuchado”, compartió.