La BBC está sumida en un fuerte escándalo después de que el tabloide “The Sun” publicase que un presentador pagó supuestamente altas sumas de dinero a un adolescente para que le enviase fotografías sexuales.
Debido al alcance de la polémica, que acapara la atención de los medios británicos, Sunak dijo hoy a los periodistas que viajan con él a Lituania, donde se celebra la cumbre de la OTAN, que le han asegurado que la cadena pública está investigando las denuncias y que este proceso será riguroso y rápido.
“Han sido acusaciones impactantes, por supuesto que lo fueron. La ministra de Cultura, (Lucy Frazer), habló con el director general (de la BBC, Tim Davie), creo que el domingo, y ha asegurado que el proceso que están haciendo es riguroso y que será rápido, así que hemos tenido esas garantías”, agregó el primer ministro.
Debido a la naturaleza de las denuncias, “es correcto que se investigue con rapidez y rigor, y es importante que ahora dejemos que eso continúe”, puntualizó Sunak.
Cuando se le preguntó si conocía la identidad del presentador estrella, Sunak respondió: "No, pero me han asegurado que el proceso se llevará a cabo con vigor y rapidez".
Acusaciones son “basura”
Los abogados del joven, que ahora tiene 20 años y cuya identidad tampoco se conoce, emitieron anoche una carta para decir que las acusaciones contenidas en el periódico "The Sun", redactadas a partir de las denuncias de su madre, eran "basura".
De acuerdo con esa misiva, el letrado dijo que el chico escribió la semana pasada a la BBC para asegurar que no había “ni una sola verdad” en la historia que publicó hace unos días el tabloide.
Aún así, "The Sun" ha defendido su artículo y ha asegurado que tiene pruebas de lo ocurrido.
Según ese diario, la madre del joven pudo ver en un vídeo a la estrella de la BBC en ropa interior “listo para que mi hijo actuase para él” y aseguró que había alertado de esta situación a la cadena el pasado mayo, pero que ésta no tomó medidas.
De acuerdo con lo publicado, el presentador pagó supuestamente más de 35.000 libras (40.000 euros) al menor desde que este tenía 17 años hasta los 20 a cambio de esas imágenes sexuales, dinero con el que presuntamente el chico costeó su adicción al “crack”.