Se trata de 23 libros y 6 piezas audiovisuales de creadores que contribuyeron a consolidar la universidad mexicana más grande de América Latina.
Esta recopilación, enmarcada en el décimo aniversario del Centro de Estudios Mexicanos de la UNAM en España, será custodiada por lo menos 16 años, y en ella se encuentran publicaciones del poeta Pedro Garfias, el escritor Tomás Segovia, el crítico literario Jorge Gillén, el cineasta Luis Buñuel y obras filosóficas de José Gaos y José de la Colina, entre otros.
El legado binacional fue ingresado en la caja de seguridad número 1.407 con la presencia de Luis Montero, director del Instituto Cervantes; Juan Fernández Trigo, secretario de estado para Iberoamérica y el Caribe; Enrique Graue Wiechers, rector de la UNAM; Rosa Beltrán, coordinadora de Difusión Cultural de la UNAM; Jorge Volpi, director del Centro de Estudios Mexicanos UNAM-España, y Quirino Ordaz Coppel, embajador de México en España.
“Este legado tiene un significado de gratitud, porque en momentos difíciles, la solidaridad de México y de la UNAM abrió sus puertas a España”, aseguró Montero, quien preside el Instituto Cervantes desde hace 5 años.
Además, agregó que la UNAM “es un punto de referencia” para el instituto que encabeza, ya que a partir de colaboraciones con ella se han originado certificaciones para la enseñanza de calidad del español.
Para el rector de la universidad iberoamericana, esta entrega a la Caja de las Letras “es una aportación de España y México a la lengua y la cultura universal con la que se engrandece a ambas naciones y se enriquece la historia de la UNAM”.
Graue Wiechers resaltó que en los diez años de trabajo entre el Centro de Estudios Superiores de la UNAM y el Instituto Cervantes de la capital española se ha logrado "la movilidad académica y estudiantil, la creación de programas de doble titulación, la celebración de cátedras conjuntas y la construcción del examen de evaluación de la lengua española”.
Por su parte, la escritora Rosa Beltrán rememoró el inicio de este legado, que se remonta al 13 de junio de 1939, cuando llegó uno de los primeros barcos, procedentes de Francia, al puerto de Veracruz.
“Se trasladaron a México a casi 4.000 refugiados españoles que huían de la guerra civil y fueron favorecidos por la política de asilo del entonces presidente Lázaro Cárdenas”, explicó Beltrán, quien también destacó que en los primeros buques viajaron figuras que “le dieron una vuelta de timón” a la producción de conocimiento y a la vida pública del país azteca.
En el cierre de la conmemoración se presentaron testimonios de personas exiliadas con las grabaciones de la colección “Voz Viva” del poeta Garfias y se incluyeron declaraciones telemáticas de las escritoras Angelina Muñiz-Huberman y Pilar Ríos, quienes aportaron algunas de sus obras al legado entregado por ambos países.
La Caja de las Letras, conformada por 1.767 cofres cerrados con llave, nació en 2007 con el propósito de ser un espacio de homenaje y preservación para el legado de figuras simbólicas de la cultura española y los países hispanohablantes.