En una rápida ceremonia en Palacio de Gobierno, Castillo tomó el juramento a Huerta Olivas como ministro del Interior, sólo dos semanas después de hacer lo mismo con González, que había pasado previamente por el Ministerio de Defensa en el gobierno de Pedro Pablo Kuczynski (2016-2018).
Huerta Olivas es abogado y licenciado en Administración y Ciencias Policiales egresado de la Escuela de Oficiales de la Policía Nacional del Perú, además ha sido jefe de equipo de investigación de la Dirección Contra la Corrupción en apoyo al Ministerio Público.
En las últimas horas, González había autorizado la creación de un grupo especial de la Policía Nacional para apoyar los casos de la fiscal anticorrupción Marita Barreto, que tiene a su cargo las investigaciones contra los más altos funcionarios, y se había comprometido a localizar a los prófugos en la denuncia abierta contra el mandatario, entre ellos el exministro de Transportes Juan Silva, el exsecretario de Palacio Bruno Pacheco y un sobrino de Castillo, Fray Vásquez.
Los tres están denunciados en el caso de presunta organización criminal abierto contra Castillo por presuntamente haber recibido dinero, para entregar al mandatario, a cambio de adjudicar obras de infraestructura a determinadas empresas.
En el lapso de unos 60 minutos, el gobernante peruano anunció este martes la salida de González del gobierno y la juramentación de su reemplazante.
"En nombre del Gobierno del pueblo, agradezco los servicios prestados a la Nación del señor Mariano González Fernández como ministro del Interior", anunció Castillo en su cuenta de Twitter.
González había jurado al cargo el pasado 4 de julio para reemplazar al censurado Dimitri Senmache y fue el sexto ministro del sector del actual Gobierno, que celebrará sus primeros 12 meses el próximo día 28.
Sin embargo, el futuro de González en el Ejecutivo aparentemente quedó en entredicho hace una semana cuando la Policía Nacional detuvo, por varias horas, al colaborador eficaz de la fiscalía Zamir Villaverde, que ha ofrecido pruebas de la presunta participación del mandatario peruano en una organización criminal enquistada supuestamente en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones.
Villaverde fue detenido en Lima, un día después de salir de prisión preventiva, y mientras es investigado en libertad en el caso abierto contra Castillo y varios ex colaboradores, incluido el exministro Juan Silva, y familiares del jefe de Estado.
Tras ese incidente, González dijo que pidió la renuncia del jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia (Dini) de la Policía Nacional y negó que, desde el Ministerio del Interior, se haya promovido un “reglaje” o seguimiento a Villaverde, quien ha asegurado haber entregado miles de dólares a Castillo, a través del exministro Silva, para favorecerlo en adjudicaciones de obras.