Según los datos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE), se confirma el descenso de la población española iniciado el 2020 con el covid-19, que sigue por debajo de los 42 millones, mientras los extranjeros superan los 5,5 millones.
La caída del número neto de españoles se cifra en el 0,1 %, mientras que el aumento de 72.410 extranjeros empadronados representa un alza del 1,3 %, y de ellos, el 0,8 % son de la Unión Europea (UE) y el 1,5 % son de fuera de esa comunidad.
Estos datos del INE, todavía provisionales, apuntan a cierta contención en la bajada de la población española, que en 2020, cuando la pandemia impactó de forma más contundente en el país, llegó a disminuir en 71.683 habitantes, con lo que se invirtió una tendencia de constante aumento global iniciada en 2016 gracias, sobre todo, a la inmigración.
Del total de población, el 49 % son hombres y el 51 % restante, mujeres, y si mientras entre los españoles son más las féminas (51,1 %), entre los extranjeros hay más varones (50,1 %).
Por grupos de edad, la media de todos los empadronados es de 44,1 años, pero en el caso de los españoles sube a los 45 y baja para los extranjeros a los 37,1.
De este modo, España se sitúa por debajo de la media de edad de países como el Reino Unido (54,1 años) y Alemania (50 años), pero por encima de Francia (43).
En cuanto a los extranjeros inscritos procedentes de países de la UE, que suman 1.605.384 personas, los más numerosos son los rumanos (623.097), seguidos de los italianos (273.889) y los alemanes (115.099).
Por otro lado, entre los no comunitarios destacan marroquíes (879.943), colombianos (312.915) y británicos (290.372).
Aumentaron sobre todos los colombianos (21.164 más), los italianos (16.633) y los venezolanos (11.672).
Con 110.977 empadronados en 2021, los ucranianos figuran en el grupo de los 20 países con colectivos más numerosos asentados en España.