Será un regreso “con más fuerza que nunca”, entre el 1 y el 10 de julio, por la reivindicación de la “igualdad en diversidad”, ya que la “invisibilidad del colectivo ha sido directamente proporcional”, al aumento de los discursos y delitos de odio en Europa y el mundo, según un comunicado del Comité Organizador del Orgullo Estatal LGTBI difundido este miércoles.
Es “muy importante e imprescindible” que el Orgullo vuelva a celebrarse en Madrid “con todas las garantías de movilidad y de participación para toda la comunidad LGTBIQ+” porque es la “mayor herramienta” de visibilidad y cambio con la que cuenta el colectivo y “una de las más poderosas” dentro del activismo, de acuerdo con los organizadores.
Será un programa amplio de actos, actividades, conciertos y una agenda cultural diversa, en la que se incluye "una histórica" conferencia internacional de derechos humanos.
"Nos manifestaremos el sábado 9 de julio para volver a conseguir que nuestra ciudad y nuestro Orgullo, el más grande de Europa, siga siendo un referente internacional de Paz, Igualdad, Diversidad, Inclusión y Libertad", señala el comité organizador.
El Orgullo de Madrid es tradicionalmente uno de los más concurridos del mundo, con la llegada de muchos miles de visitantes, sobre todo de Europa y América. En 2017, la ciudad fue sede del Orgullo Gay Mundial (World Pride), con más de un millón de participantes en la manifestación con que terminaron las celebraciones.
El Orgullo de este año se enmarca en las celebraciones que la Asociación Europea de Organizadores de Orgullo (EPOA) ha programado con motivo del treinta aniversario del primer EuroPride (Londres, 1992).