El inusual documento tripartito fue difundido al concluir la cumbre, coordinada por Brasil y realizada en forma telemática, en la que Uruguay condicionó su apoyo a la rebaja de los aranceles a que el Mercosur modifique la cláusula que impide a sus miembros negociar acuerdos comerciales con otros países o bloques en forma individual.
Esa última alteración, respaldada a medias por Brasil y Paraguay y a la que se opone más frontalmente Argentina, no fue adoptada en esta cumbre, aunque el comunicado tripartito sugiere que el Mercosur debatirá esa flexibilización exigida por Uruguay en los próximos meses.
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La declaración firmada por Argentina, Brasil y Paraguay también contiene un repaso de las actividades realizadas por el Mercosur en los últimos seis meses, bajo la presidencia brasileña, y destaca la voluntad de los tres países firmantes en reforzar la cooperación al interior del bloque.
El documento dice que Argentina, Brasil y Paraguay "destacan su compromiso con la revisión del Arancel Externo Común (AEC) como instrumento primordial para el fortalecimiento de la Unión Aduanera del Mercosur".
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Sin embargo, también subraya que esos tres países se han comprometido "a lograr un acuerdo cuatripartito en beneficio de la productividad y competitividad de las economías de los Estados Partes" durante la próxima presidencial semestral, que desde este viernes está en manos de Paraguay.
En ese comunicado, Argentina, Brasil y Paraguay reiteraron además "su compromiso con el Mercosur" y dejaron claro su "propósito" de trabajar "con espíritu constructivo y ánimo de entendimiento, en favor del fortalecimiento del proceso de integración".
La rebaja del 10% del AEC estaba virtualmente consensuada, pero se frustró por la presión de Uruguay, que exige a cambio una mayor libertad para avanzar en forma individual hacia acuerdos comerciales con otros países o bloques, como de hecho lo hace ya con China.
Este viernes, al intervenir en la cumbre, el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, dijo compartir las ansias de "prosperidad y libertad" que existen en el Mercosur, pero apuntó que ciertos desacuerdos son generadores de "ciertas tensiones" en los "intereses nacionales".
Según el mandatario uruguayo, se debe llegar "necesariamente" a un "punto intermedio" en esas tensiones, "para que todos se sientan satisfechos".
Aunque no mencionó las negociaciones con China en ningún momento, Lacalle Pou enfatizó que "Uruguay ha sido claro en cuál es el camino a seguir", agregó que insistirá en su postura "en los tiempos que vienen" y garantizó que su país seguirá "apostando de forma muy optimista en ese futuro".