El juez Paul L.Friedman confirmó en una vista que levantará en la citada fecha las fuertes restricciones impuestas a Hinckley en julio de 2016, cuando salió del hospital psiquiátrico en el que estuvo internado.
"Si no hubiera intentado asesinar al presidente, le habría dado la libertad sin condiciones hace mucho, mucho tiempo", afirmó Friedman sobre Hinckley, quien el 30 de marzo de 1981, cuando tenía 25 años, abrió fuego contra Reagan a las puertas del Hotel Washington Hilton, del que salía el entonces mandatario tras pronunciar un discurso.
En julio de 2016, Hinckley dejó el psiquiátrico después de que se determinara que no suponía "un peligro ni para él ni para otros", y desde entonces reside en Williamsburg (estado de Virginia), a unos 250 kilómetros de Washington, con su madre, Jo Ann Hinckley, quien murió el pasado 30 de julio.
Cuando se le permitió salir del hospital, el juez ordenó que Hinckley estuviera sujeto a estrictas condiciones que incluían desplazarse a Washington una vez al mes para recibir tratamiento psiquiátrico.
También tenía prohibido poseer armas o drogas y establecer contacto con los familiares de sus víctimas.
Además, se le impusieron restricciones para su movilización y para el uso de internet, aunque el año pasado obtuvo una autorización judicial para difundir música en línea en una cuenta a su nombre.
Según los términos del acuerdo, Hinckley, de 66 años, deberá superar un periodo final de observación de nueve meses.
La fiscal federal adjunta Kacie Weston indicó que el Gobierno acepta el acuerdo si Hinckley mantiene, desde ahora y hasta junio del año entrante, la conducta que ha tenido durante este tiempo.
Según la fiscal, "en este momento la pelota está en manos" de Hinckley.
En el atentado de 1981, Hinckley hirió de gravedad a Reagan, que logró recuperarse tras recibir un balazo cerca del corazón.
Además, hirió al secretario de prensa de Reagan, James Brady; al agente del Servicio Secreto Tim McCarthy, que se abalanzó sobre el mandatario para hacer de escudo, y al policía Thomas Delahanty.
Hinckley confesó haber atentado contra el presidente para atraer la atención de la actriz Jodie Foster y fue declarado no culpable en junio de 1982 debido a su enajenación mental.
Ronald Reagan falleció en 2004 a la edad de 90 años, pero sus hijos, Ron Reagan Jr. y Patti Reagan Davis, se opusieron siempre a la liberación de Hinckley.