“Preveíamos la entrada en vigor de estas disposiciones el 1 de agosto”, recordó el primer ministro. “He comprendido que esa fecha era tardía (...). El decreto entrará entonces en vigor la semana próxima”, indicó, durante una declaración de política general ante los senadores.
"El uso de la mascarilla constituye, junto al respeto de las medidas barrera, una medida de prevención y protección eficaz", dijo.
El 14 de julio, el presidente Emmanuel Macron anunció que el uso de la mascarilla sería obligatorio en los lugares cerrados a partir del 1 de agosto, pero hubo una importante reacción de un sector de la sociedad que pedía que esta norma se aplicara sin dilación.
En la región francesa de Mayenne, al oeste, el uso de la mascarilla es obligatorio en seis localidades debido al aumento importante de los casos de covid-19, que ya superan los 50,1 por cada 100.000 habitantes.
En París y su periferia, el ministro de Salud, Olivier Véran, advirtió de que hay algunos signos de que la epidemia retoma fuerza e instó a los ciudadanos a ser "cuidadosos".
Francia ha superado los 30.000 muertos por coronavirus y mantuvo el confinamiento durante dos meses, hasta mediados de mayo.