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Ciertos alimentos son realmente fáciles de que vuelvan a crecer en casa a partir de las sobras que quedan, y algunos pueden, incluso, ser cultivados en frascos o en pequeñas macetas en la ventana de la cocina. Aquí algunas ideas para tener una segunda cosecha de estos vegetales cotidianos.
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Cuáles son los alimentos que más fácilmente podemos cultivar en casa
Lechugas. Muchas verduras que compramos en el mercado vienen con sus raíces, como en el caso del cilantro, las espinacas y las lechugas. ¿Por qué no aprovechar para plantarlas y volver a obtener una planta? Solo se trata de sumergir las raíces en un recipiente de vidrio con alrededor de 2 centímetros de agua y colocar el recipiente junto a una ventana o en un lugar donde se mantenga constante el nivel de luz y calor.
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Hay que chequear diariamente que el agua se mantenga en 1,5 a 2 centímetros. En un par de semanas se comenzarán a ver nuevas hojas y estarán completamente crecidas en tres o cuatro semanas. Si las colocamos en una maceta con abono crecerán aún más.
Ajo. Cuando el ajo comienza a germinar, los pequeños brotes verdes son muy amargos para cocinar. Pero en lugar de tirar a la basura los dientes germinados, se pueden poner en un vaso con un poco de agua y hacerlos crecer. Los brotes tienen un sabor mucho más suave que los dientes de ajo y son muy buenos en ensaladas, pastas y como decoración de los platos.
Zanahorias. Los extremos de las zanahorias que normalmente cortamos y tiramos pueden crecer hojas si las ponemos en un recipiente con un poco de agua, cuidándolas diariamente al igual que las lechugas. No será posible obtener zanahorias nuevamente, pero en una o dos semanas darán bonitos brotes verdes que son igualmente muy nutritivos y se podrán usar luego en ensaladas, guisos, sopas, jugos y batidos vegetales, y también como decoración de los platos.
Albahaca. Si no las conseguimos con sus raíces, basta con colocar algunos tallos de 10 centímetros en un vaso con agua y ponerlos en un lugar con luz directa. Cuando las raíces tengan como 2 centímetros de largo, se pueden plantar en macetas para hacer crecer toda un planta de albahaca.
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Cebollas y cebollitas de verdeo. Se puede plantar la raíz desechada de la cebolla en una maceta o directamente en la tierra afuera para volver a crecerla. Una vez cortado el extremo donde está la raíz, hay que dejarlo que se seque unas horas. Luego plantarlas en una maceta con abono.
Al poco tiempo comenzarán a tener brotes e incluso el bulbo comenzará a dividirse de manera de obtener varias plantas nuevas. Se pueden cosechar temprano y tener cebollas verdes frescas, o esperar hasta que bulbo esté completamente desarrollado.
Apio. Si conseguimos una planta de apio con sus extremos, se pueden colocar en agua hasta que desarrolle raíces. Luego se planta en una maceta con abono y al cabo de 10 días se desarrollará una nueva planta de apio, ideal para ensaladas, sopas, guisos y licuada con otras verduras para hacer un nutritivo jugo vegetal.