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La destrucción de 1.450 kilos de marihuana prensada se llevó a cabo en la Laminadora Minga Guazú. El procedimiento fue acompañado por el fiscal adjunto de Alto Paraná, Jorge Sosa; el fiscal antinarcóticos Elvio Aguilera y el juez penal de Garantías, Carlos Vera Ruiz, quien autorizó y acompañó la quema.
Según los antecedentes, el cargamento fue incautado por agentes de la Senad (Secretaría Nacional Antidrogas) el 27 de julio de 2023, alrededor de las 10:00 horas, en el Km 20 de Minga Guazú.
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En aquella intervención, Marco Antonio Florentín Torres (40) transportaba la droga en un camión Foton Aumark TX, de color azul y con matrícula Nº BUF847.
Posteriormente, por disposición del fiscal Aguilera, el vehículo con la carga fue trasladado hasta la sede regional de la Senad de Ciudad del Este para una inspección más detallada.
Durante la revisión, se encontró un doble fondo de madera terciada en el techo de la carrocería del vehículo, que contenía un total de 65 paquetes de marihuana prensada.
Además, en el asiento del acompañante del vehículo se halló una pistola calibre Glock 9mm, de color negro, con número de serie suprimido, junto con un cargador de 14 cartuchos sin percutir.
Análisis de la droga
Luego, para confirmar la naturaleza de las sustancias incautadas, el personal antidrogas procedió a pesarlas y someterlas a un análisis primario de campo utilizando el sistema narcotest.
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La prueba del análisis arrojó resultado positivo para marihuana, con un peso total de 1.450,200 kilogramos (mil cuatrocientos cincuenta kilos con doscientos gramos).
Ante la evidencia recolectada, el fiscal Elvio Aguilera presentó la imputación contra Florentín Torres por tenencia sin autorización de sustancias estupefacientes y transgresión de la Ley de Armas.
En la causa también se realizó la extracción de muestras de la droga para el análisis laboratorial, bajo la figura de anticipo jurisdiccional de prueba, antes de la destrucción de la carga.