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Fernando Escobar, padre de la beba, relató que el domingo pasado llegaron con su esposa a las 6:00 al hospital Los Ángeles de Ciudad del Este, ya con trabajo de parto. Los médicos de guardia, en ese momento, notificaron que su esposa no iba a dar a luz y que vuelvan a la tarde.
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Como ordenaron los médicos, la pareja volvió al centro asistencial a las 18:00 del mismo día; sin embargo, fueron recibidos con la misma respuesta y tuvieron que retornar.
El lunes nuevamente volvieron al hospital a las 5:00, ya que su esposa ya estaba con dolores cada vez más fuertes. A pesar de esa situación, les pidieron que retornen a las 9:00, momento en que finalmente la internaron.
El parto se realizó a las 12:30, pero la bebé ya había ingerido líquido amniótico, por lo que ya estaba delicada. Los médicos avisaron que no había cama disponible en terapia intensiva y allí comenzó la odisea de búsqueda.
Los familiares también se abocaron en buscar una lugar de terapia intensiva y consiguieron uno e incluso obtuvieron una ambulancia, pero poco antes el personal de salud ya informó el fallecimiento del bebé.
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Conforme a los familiares, los profesionales dijeron que la beba sufrió complicaciones pulmonares a raíz de la ingesta del líquido amniótico. Como causa de la muerte, los médicos registraron insuficiencia respiratoria.
El director del centro asistencial, Jorge Gamarra no atendió la llamada para tener una respuesta sobre el proceder de los médicos de guardia en la atención de la parturienta y a su bebé.