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Participaron de la reunión los abogados, Hugo Samaniego, director de Derechos Humanos del Ministerio del Interior, y Osmar Ubeda en representación del INDI. Igualmente, asistieron representantes de la citada comunidad y autoridades locales.
Los aborígenes mantienen un conflicto de larga data con los productores por la ocupación de una parcela de tierra. Durante el encuentro se acordó que habrá una tregua mientras se gestione una mensura judicial a fin de determinar las propiedades.
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En la comunidad están asentadas unas 40 familias que totalizan 150 personas entre niños, jóvenes y adultos.
Explicó que se están tratando de evitar algún hecho violento en la zona. Señaló que
en la zona hay 2.999 hectáreas que pertenecen a dicha comunidad pero no está ocupada por los aborígenes debido a un conflicto interno que se va a tratar de subsanar.