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Es el caso de la estudiante universitaria Leila Rebeka Velázquez Castillo (22), a quien le tomaron la muestra el pasado 24 de julio en el Pabellón de Contingencia del Hospital Regional del Ciudad del Este.
La joven previamente se sometió a la prueba de sangre y dio positivo al COVID-19, por lo que recurrió al test del hisopado –un examen de mayor fiabilidad– del ministerio para conocer con mayor certeza su cuadro médico.
A 19 días de la extracción de la muestra, la estudiante aún no recibió una respuesta del Ministerio de Salud Pública.
“Todas las veces que llamo al 154 encuentro una larga lista de espera; una hora, una hora y medio. Siempre me dan una misma respuesta: que mi código aún no está, que me van a poner en la lista de quejas, que me van a llamar por cualquier cosa”, cuestionó Velázquez.
La joven había tenido fiebre por dos días y actualmente ya no presenta síntoma alguno. No obstante, pretende realizar nuevamente otra prueba del hisopado, teniendo en cuenta que el primer test reflejará su condición clínica de casi tres semanas atrás.
Cada vez son más reiteradas las quejas de los pacientes sobre la tardanza en el procesamiento de muestras de casos sospechosos de COVID-19. Directivos de la Municipalidad de Ciudad del Este, que mantuvieron contacto con el intendente Miguel Prieto (MCDE), habían denunciado que esperaron por más de dos semanas el resultado del test.
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Los pacientes que pretenden la extracción de muestra para la prueba del hisopado igualmente afrontan largas filas frente al Pabellón de Contingencia para acceder a la limitada cantidad disponible.