Medina Boselli, compositor y educador

Antonio Medina Boselli es autor de canciones románticas que tuvieron mucho éxito en la voz de Marco Antonio de Brix, pero también se destacó como educador musical. El hijo del compositor César Medina fue distinguido por el Congreso Nacional.

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La carrera de Medina Boselli se inició en la música en la década del 60 como integrante del grupo Big Boys Serenaders, de gran éxito en aquella década prodigiosa del siglo XX. Antonio tenía a quien salir. Es hijo del compositor César Medina, de reconocida labor como compositor y director de bandas y orquestas populares.

Antonio nació en Concepción y comenzó sus estudios musicales con su padre, y luego estudió didáctica e historia de la música en el Ateneo Paraguayo. También participó de cursos de dirección orquestal con Miguel A.Gilardi, Leon Burke III y Luis Szarán. Durante años se dedicó a la docencia musical, y como creador ha escrito temas como "Necesito vivir", seleccionada entre las mejores en el Festival de Viña del Mar, Chile en 1978. "La razón que nos une" y "Soñaremos como ayer" fueron ganadoras de los Festivales OTI de la canción (edición nacional) en 1980 y 1983, y "Un mundo diferente" llegó al segundo puesto en el Festival OTI de 1988, que se realizó en  Buenos Aires, Argentina.

 

La Cámara de Senadores lo distinguió el pasado 12 de octubre por su aporte artístico y cultural, a propuesta del senador Juan Carlos Galaverna. "Ojalá que usted siga creando y siga componiendo para que nosotros sigamos disfrutando", refirió Galaverna, al momento de dirigirse a Medina Boselli, en el homenaje. "Reciba usted de nuestra parte con la mayor sinceridad, con los mejores sentimientos, este modesto homenaje, y que no se apague su entusiasmo por servir a la causa cultural de nuestra República, así como lo hizo su inolvidable padre, el maestro César Medina", manifestó el legislador. A su turno, el maestro Antonio Medina Boselli, expresó su emoción y el honor de recibir dicho reconocimiento. "Me compromete a seguir aportando más a la cultura musical especialmente y darle el lugar preferencial a la música paraguaya".

Dedicó el homenaje a su esposa e hijos; recordó además a su padre el maestro César Medina, quien en vida con sabiduría supo orientar y apoyar sus inclinaciones artísticas. Recordó al músico Marco Antonio de Brix, que interpretó dos temas de su autoría que hasta hoy siguen teniendo éxito. "Pero lo que más marcó en mí fue compartir con la juventud estudiosa por muchos años como docente, y con la educación musical comprendieron y aprendieron la efectividad, la sensibilidad y la nobleza, que la música es capaz de penetrar hasta las fibras más íntimas del corazón, la música tiene la magia de pacificar las almas en conflicto, la música está en todas partes; la música es capaz de hacer un milagro de soñar y de amar", concluyó diciendo el compositor.

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